WeWork, la empresa que ofrece oficinas y servicios compartidos, está despidiendo a cerca de 2,000 empleados y los inversionistas están sufriendo fuertes pérdidas después del rescate de la compañía.
El paquete de rescate propuesto por SoftBank involucra al fundador Adam Neumann, que ha vendido alrededor de 1,000 millones de acciones y ha recibido consultoría de 185 millones de dólares de la firma japonesa, incluso cuando el acuerdo valora a la empresa en 8,000 millones de dólares, según personas cercanas a la transacción.
Aunque Neumann deja el directorio de la compañía, seguirá siendo multimillonario, cuyo patrimonio neto es de al menos 1,000 millones de dólares, según los cálculos del índice de multimillonarios de Bloomberg.
Si bien esto es una fracción de lo que era el papel en enero, la última vez que SoftBank hizo una inversión en WeWork, tuvo un entorno notable de un negocio que nunca ha obtenido ganancias y ha visto su oferta pública inicial rechazada por inversores escépticos.
El prospecto retirado de WeWork, matriz de We co., esbozó formas en que Neumann ya ha monetizado parte de su participación. Vendió cientos de millones de dólares en acciones en rondas de financiamiento anteriores, según el Wall Street Journal.
También tiene una línea de crédito de 500 millones de dólares, garantizada por acciones de WeWork, UBS, JPMorgan Chase y Credit Suisse; cerca de 380 millones de dólares estaban pendientes al 31 de julio. JPMorgan también le prestó 97.5 millones de dólares.
El acuerdo de SoftBank extiende 500 millones de dólares de crédito a Neumann.
Los préstamos bancarios ayudaron en Neumann, de 40 años, a recolectar activos dignos de un multimillonario, en un momento en que la mayor parte de su patrimonio neto estaba en papel.
A lo largo de los años, compró cerca de 100 millones de dólares en propiedades, incluyendo una casa en Manhattan, una granja del condado de Westchester y una propiedad de 11 acres en California. También posee 10 propiedades comerciales, cuatro de las cuales están arrendadas a WeWork.
WeWork había acumulado anteriormente más de 10 mil millones de dólares en compromisos con SoftBank, el conglomerado japonés de tecnología y comunicaciones, liderado por Masayoshi Son, y parecía dirigirse a una rica oferta pública este verano.
Pero los inversionistas públicos se inquietaron con WeWork, que perdió 900 millones de dólares en la primera mitad del año. A medida que su valoración estimada se desplomó, la compañía destituyó a Neumann como director ejecutivo y finalmente retiró el papeleo de la OPI.
