Desde que ChatGPT arrasó en Internet desde su lanzamiento en noviembre, Microsoft, que posee una participación en la Startup OpenAI, mostró cómo la tecnología complementará su motor de búsqueda Bing.
Para no quedarse atrás, el gigante de las búsquedas, Google, mostró rápidamente un servicio novedoso llamado Bard que incorpora soluciones similares de IA.
Una gran cantidad de empresas chinas, desde Alibaba hasta NetEase, también anunciaron esta semana que están desarrollando servicios similares a ChatGPT.
No obstante, los reguladores en China advierten a los inversionistas contra el frenesí. Al menos tres empresas han recibido consultas de las bolsas de valores locales, después de que las acciones subieran más de 30 % en tres sesiones consecutivas esta semana.
Los analistas dijeron que tomará algún tiempo para que surjan verdaderos ganadores en el espacio, siendo clave la aprobación regulatoria y la monetización de la tecnología para que tales servicios servicio despeguen en China.