Samsung Electronics experimentó una significativa caída en sus beneficios durante el segundo trimestre del año, debido a la menor demanda global de chips.
Su beneficio neto fue de 1.72 billones de wones (aproximadamente 1,352 millones de dólares), lo que representa una disminución del 84.5% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Asimismo, el ingreso bruto operativo (Ebitda) de la compañía se redujo en un 88.2%, alcanzando los 1.71 billones de wones (unos 1,345 millones de dólares), mientras que su ganancia operativa fue de unos 670,000 millones de wones (527 millones de dólares), lo que equivale a un retroceso del 95.24% respecto al segundo trimestre de 2022.
La facturación del gigante surcoreano se situó en unos 60 billones de wones (47,196 millones de dólares), lo que representa una disminución del 22.3% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
La compañía atribuye estos resultados a la disminución de la demanda de chips utilizados en dispositivos electrónicos y vehículos, lo que ha llevado a su división pertinente a sufrir la primera pérdida operativa en 14 años debido al aumento del inventario de semiconductores.
A pesar de estos resultados, Samsung espera una recuperación gradual de la demanda en la segunda mitad del año, especialmente impulsada por un aumento en los pedidos de chips de memoria para el desarrollo de productos y servicios relacionados con la inteligencia artificial (IA).
Los fabricantes de semiconductores, incluido Samsung, han reducido la producción de chips para reducir los inventarios y se espera que los efectos positivos de esta decisión sean más evidentes en el futuro.
Además, la compañía espera mejorar sus resultados gracias al lanzamiento de nuevos dispositivos móviles y aplicaciones para PC.
En este sentido, recientemente presentó su nueva generación de móviles plegables, el Galaxy Z Flip5 y Galaxy Z Fold5, que cuentan con nuevas bisagras que los hacen más ligeros y compactos, buscando mantener su dominio en este segmento en el que competidores como Google o Motorola también han incursionado.
Samsung tiene como objetivo que la mitad de sus ventas de terminales telefónicos para el año 2025 sean dispositivos plegables.