El CEO de Microsoft, Satya Nadella, tiene como objetivo impulsar al gigante del software hacia el futuro.
Durante los últimos meses, los usuarios de Windows 11 han tenido la capacidad de acceder al mejorado chatbot de Microsoft basado en OpenAI (conocido como ‘Copilot’) directamente desde sus escritorios, prescindiendo de la necesidad de un navegador, una aplicación o una suscripción.
Esta conveniencia resulta gratamente llamativa y representa un logro notable en términos de estrategia de marketing.
En contraste, los usuarios de MacBook aún dependen del asistente virtual más antiguo (y en general, menos impresionante), Siri, de Apple.
Pero esto es solo el inicio, ya que Nadella ha asumido el compromiso de llevar la inteligencia artificial a todos los productos de Microsoft, incluso aquellos que existen desde la época de las puntocom.
De acuerdo con un informe reciente de Windows Central, es posible que en breve se implementen actualizaciones de IA en las aplicaciones por defecto de Windows.
Esto abarca el servicio de cámara de Microsoft, la herramienta de captura de pantalla y, lo que resulta aún más emocionante, su apreciado (aunque a veces menospreciado) editor de gráficos, históricamente conocido como MS Paint.
Por supuesto, existe otra consideración importante al evaluar este tipo de integraciones de IA: gestionar cargas de trabajo de datos tan pesadas conlleva un costo significativo. Por lo tanto, aunque la idea de llevar una versión modernizada de MS Paint a la audiencia general es tentadora, también es necesario ser cauteloso en cuanto a los desafíos financieros que esto podría implicar.