La startup de inteligencia artificial para alimentos y agricultura, Cropin Technology Solutions, presentó una solución de inteligencia en tiempo real para pronosticar los rendimientos futuros de 13 cultivos vitales.
La inteligencia artificial está ayudando a superar los cuellos de botella en la industria agrícola.
La empresa, con sede en Bangalore, presentó Sage, impulsado por el modelo de inteligencia artificial Google Gemini de Alphabet.
Esta tecnología convierte el paisaje agrícola mundial en un mapa basado en cuadrículas, ofreciendo inteligencia predictiva precisa basada en datos históricos.
Los responsables de la toma de decisiones pueden hacer preguntas sobre el rendimiento de los cultivos y el ciclo de vida en su idioma nativo, obteniendo información sobre la productividad, el clima, las prácticas agrícolas y el suelo de 13 cultivos que representan el 80% de la demanda mundial de alimentos.
‘Predecir el futuro de un cultivo en particular es un salto importante, y vemos industrias enteras entrar en turbulencias debido a la escasez de, por ejemplo, la cosecha de cacao o naranja’, dijo Krishna Kumar, fundador y director ejecutivo de Cropin.
A medida que la población mundial se dispara y aumentan las preocupaciones sobre la seguridad alimentaria, la IA generativa y los grandes modelos de lenguaje tienen el potencial de transformar la agricultura moderna en un mundo afectado por el clima.
Esto puede ayudar a una amplia gama de clientes, desde fabricantes de bienes de consumo envasados y productores de semillas, hasta instituciones financieras y gobiernos, a planificar la producción de cultivos y tomar decisiones informadas sobre el cultivo. Según Cropin, las tierras agrícolas del mundo abarcan 4,800 millones de hectáreas.
La tecnología de la compañía fusiona IA generativa con cuatro décadas de datos climáticos, datos terrestres y gráficos de conocimiento para decodificar cada cultivo país por país, prediciendo cómo se comportará un determinado cultivo esta temporada, el próximo año y durante los próximos cinco años.
‘Tenemos la tecnología para predecir, por ejemplo, qué variedad de papa se producirá de manera óptima en ciertas regiones de Idaho o Kenia, ayudando a un destacado cliente fabricante de chips a planificar su cadena de suministro’, dijo Kumar.