Creswin es una empresa 100% mexicana que ha ganado concursos internacionales por su innovación. Desde 1990 fabrica software para control empresarial en una solución que engloba comercio electrónico, vendedor móvil y dirección a distancia, totalmente en línea y en tiempo real
Imaginar que una empresa mexicana desarrolle un software que la lleve a la cima y que además sea líder en su ramo, es algo que a veces nuestra idiosincrasia no nos permite. Pero Ignacio Vizcaíno pensó de otra forma y desde 2000 se enfocó a desarrollar y comercializar un software único en su tipo en el mundo.
Su invención es un sistema de información ERP (Enterprise Resource Planning), un software para determinado fin empresarial, recursos humanos, producción, compras, inventario, etcétera. Dado que es hijo de músicos, decidió bautizar a la primera versión como Crescendo, esto devino en Creswin, la abreviación de Crescendo para Windows.
Con este producto vio la luz Creswin, una empresa 100% mexicana que opera desde la Ciudad de México y que desde 1990 hace software para control empresarial en una solución que engloba comercio electrónico, vendedor móvil y dirección a distancia, totalmente en línea y en tiempo real.
Para 1994, hicieron la primera versión abierta de dicho software y comenzaron a exportar, no de forma masiva, sino por petición de gente interesada en el extranjero. En 1998, le entraron al comercio electrónico y vendieron más de mil tiendas online que ellos mismos hosteaban:
“La gente era muy celosa de que sus datos estuvieran en un lugar que ellos no controlaban, entonces desarrollamos un software para que los clientes hicieran comercio electrónico desde su oficina”, explica Vizcaíno en entrevista con ELUNIVERSAL.com.mx. Pese a que en aquel momento, la conexión de banda ancha era muy cara, el proyecto fue un éxito.
Imparables, y siempre a la par de la tecnología, para 2001 ya tenían listo el producto para usarse desde una PDA; su último lanzamiento es que se puede manejar desde un celular: “Como director puedes estar en cualquier parte del mundo y con un teléfono celular consultar cómo va el negocio, cuánto han vendido, cuánto han cobrado, cuál es la situación financiera, etcétera”. Dicha tecnología se llama “Dirección a distancia.”
Otro de sus productos es el “Vendedor móvil” y con él se pueden estar levantando pedidos en línea, garantizando existencias, sin tener que regresar a la oficina, ni verificando si el cliente tiene crédito. Al estar todo el tiempo en línea, la transacción se hace en tiempo real, cuando se envía, se imprime el pedido y la mercancía se puede procesar para que el cliente la reciba en la tarde. Se estima que con este sistema se aumenta hasta 800% la productividad de la fuerza de ventas.
Fundando su empresa
A finales de los ochentas, Ignacio Vizcaíno empezó a programar como freelance. Se dedicaba entonces a hacer trajes a la medida de los directores: “Me pedían todo lo que no hacían los sistemas que existían. Eso le solucionaba la vida al contador, al facturista o al almacenista, pero cuando un director quería hacer una proyección o un análisis de rotación, no tenía los elementos para hacerlo”.
Al darse cuenta de la carencia, decidió hacer un sistema enfocado a la alta dirección: “Cuando hice la primera versión, lo que gané fue que nuestro sistema fuera creado para resolver los problemas de dirección. Cuando diseñas con esa perspectiva, al hacer la parte operativa estás considerando todo lo que le va a contribuir a la dirección en la toma de decisiones, planeación y reducción de costos”.
Aquella arquitectura de diseño, les dio un premio en 1994: “Siempre tenemos en perspectiva qué es lo que va a salir en tecnología y las nuevas propuestas de management para estarlas incluyendo en nuestros desarrollos”.
Estar siempre a la vanguardia, les ha permitido hacerse de dos premios internacionales: El WYBA, World Young Business Achiever, por creatividad e innovación entre más de 170 países participantes. El último, les fue entregado el pasado 30 de junio por parte de la World Confederation of Business (Worldcob), organización internacional que agrupa a las empresas y empresarios más destacados del mundo, quien les entregó el galardón internacional The Bizz Awards 2006 en la categoría de la mejor empresa innovadora de software.
Con ello, se convirtieron en la única empresa mexicana que lo ha recibido: “Nos lo dieron porque somos la primera empresa en el mundo que logró integrar todas las tecnologías en un solo sistema abierto, desarrollamos el lenguaje del sistema y creamos la perspectiva de visión del software.”
Convirtiéndose en gigante
Cuando la empresa se fundó eran sólo cuatro empleados; diez años después eran 130, pero en 2006, son 48 en México y siete en el extranjero. Sus primeros clientes fueron mayoristas de cómputo que luego fueron adquiridos por empresas internacionales; cuando eso pasó, a esas empresas les gustó el software y lo empezaron a poner en sus filiales en otros países.
Hoy tienen más de 16 mil sistemas instalados en más de 20 países, en promedio cada sistema tiene 10 usuarios; entre sus clientes hay desde changarritos hasta grandes corporativos.
Este año registraron un crecimiento del 245% respecto al año anterior y abrieron oficinas en Houston, pero no pretenden detenerse. Para 2007 abrirán subsidiarias o representaciones mayoristas en toda América Latina.
“Nos sentimos muy orgullosos de ser mexicanos, hemos recibido a lo largo de nuestra trayectoria, tres ofertas para ser comprados e irnos al extranjero, pero las hemos rechazado porque creemos en nuestro país y sentimos que debemos devolverle algo de lo mucho que nos ha dado. Además aquí hay mucha creatividad, la única barrera que tenemos, somos nosotros mismos”, finaliza Vizcaíno.
Fuente: El Universal, Paola Morales