Blue Coat Systems, proveedor de tecnología de seguridad en la red y soluciones de optimización de redes WAN, introdujo controles de aplicaciones móviles que cierran la brecha de seguridad creada por las aplicaciones móviles no sancionadas en las redes corporativas.
A medida que los empleados llevan cada vez más sus propios dispositivos al trabajo, la brecha de seguridad en las aplicaciones móviles se ha ido abriendo. Con sus nuevos controles, Blue Coat busca ofrecer la habilidad de administrar el uso de aplicaciones no sancionadas y hacer cumplir consistentemente las políticas en todos los dispositivos que estén en la red.
El crecimiento de las iniciativas de llevar los propios dispositivos al trabajo (BYOD, por sus siglas en inglés), ha fomentado un aumento en los dispositivos móviles y aplicaciones no administradas y poco fiables sobre las redes corporativas. De acuerdo con Forrester Research, el 57 por ciento de los empleados eligieron y adquirieron su propio smartphone sin instrucción ni guía alguna por parte de su compañía. Según la compañía de medición de aplicaciones móviles Flurry, cada smartphone tiene, en promedio, 65 aplicaciones móviles instaladas. Se espera que 350 millones de empleados usen smartphones en el trabajo para 2016, y así el número de aplicaciones móviles que utilicen la red corporativa continuará disparándose.
El aumento de los dispositivos móviles en las redes corporativas crea dos riesgos distintivos que conducen a impactos indeseados o impredecibles en las redes. Primero, contribuye al creciente problema de aplicaciones sin sancionar en la red corporativa. Segundo, las políticas corporativas no pueden hacerse cumplir consistentemente en todos los dispositivos.
Como con las aplicaciones basadas en red, el uso de aplicaciones móviles está erosionando dramáticamente el control de la TI sobre la red. Sin embargo, a diferencia de las aplicaciones de red basadas en navegador, las aplicaciones móviles y sus operaciones correspondientes típicamente son independientes y quedan fuera del control de las soluciones de seguridad de red tradicionales.
Para evitar el uso no autorizado o indeseado de la red corporativa, los controles de aplicaciones móviles de Blue Coat extienden a las aplicaciones móviles los mismos controles operativos granulares que proporciona la compañía para las aplicaciones basadas en red. Con estos controles operativos, los negocios pueden imponer políticas alrededor de funciones específicas dentro de aplicaciones tanto basadas en red como móviles. Esto permite a las compañías hacer cumplir sus políticas de manera consistente en todos los dispositivos y les permite recuperar el control sobre las aplicaciones que estén usando su red.
Por ejemplo, un negocio que quiera mitigar las fugas no intencionales de información de ubicaciones confidenciales o seguras podría imponer una política para Twitter que evite que sus empleados envíe tweets pero que permita la plena lectura o acceso a monitoreo. Los controles de aplicaciones móviles de Blue Coat extienden esa política de aplicaciones basadas en la red a la aplicación móvil de Twitter, permitiendo acceso de sólo lectura en todos los dispositivos que estén en la red.