Ahora con el Buen Fin, el Internet será una opción más de pago y resulta ser unas de las mejores herramientas para poder realizar compras de manera más cómoda para así, evitar las largas filas en los centros comerciales.
Sin embargo, no podemos evitar reconocer que es uno de los métodos más vulnerables para que los estafadores en línea puedan robar, desde dinero o identidades, hasta información financiera de los consumidores, como consecuencia de las consultas y transacciones bancarias en línea utilizadas para la compra de bienes y servicios. Las estafas siguen siendo un negocio redondo para los ciberdelincuentes y, desafortunadamente, la mayoría de los consumidores no cuentan con ninguna protección.
Y es que justo hablando sobre los fraudes y estafas en línea, los crímenes cibernéticos son difíciles de cuantificar. Sin embargo, diversas investigaciones, como el informe de AFP, calcularon que el costo de los crímenes cibernéticos en Latinoamérica es mayor a 93 millones de dólares por año.
De acuerdo con Limor Kessem, experta en Ciberinteligencia de RSA, la División de Seguridad de EMC, las pérdidas financieras y el tiempo invertido en actividades criminales en línea supera el costo del mercado mundial conjunto de la marihuana, cocaína y heroína.
Con el propósito de ayudar y orientar a las personas con sus compras por Internet en este Buen Fin 2012, RSA, la División de Seguridad de EMC, comparte algunos consejos básicos para evitar ser víctimas de fraudes en línea.
Actualice su dispositivo
Es indispensable asegurarse que cualquier dispositivo con el que se pretenda realizar alguna compra (computadora personal, tablet y/o teléfonos inteligentes) cuenten con seguridad. Algunas recomendaciones son:
- Contar con las últimas actualizaciones en navegadores. Para esto es recomendable activar las actualizaciones automáticas y utilizar las últimas versiones del buscador.
- No almacenar información en la computadora o en los dispositivos (detalles de nombre de usuario, contraseñas y número de tarjeta de crédito), ya que en caso de extravío del dispositivo o de acceso ajeno a este, se pondría en riesgo de robo de identidad y ocasionarle una pérdida de dinero.
- Establecer contraseñas fuertes de autenticación y realizar cambios constantes. De igual manera es importante contar con distintas contraseñas para distintos sitios y páginas, así como de correos electrónicos. En caso de que una de estas fuera violada, las demás no correrían el riesgo de serlo también.
Compras seguras
El primer paso es comprobar la seguridad del sitio, antes de ingresar cualquier información personal o de realizar algún tipo de pago.
- Verificar que en la barra de direcciones del navegador o página web aparezca el candado cerrado.
- La dirección web debe comenzar con «https» o «shttp”, ya que la «s» indica seguridad.
- Buscar protección adicional a las contraseñas, actualmente la mayoría de los comerciantes son compatibles con las normas SecureCode Visa / MasterCard que le proporcionan una seguridad adicional.
- Buscar las políticas de privacidad, número de teléfono y dirección física del comerciante para que estén a la mano en caso de que llegara a presentarse algún problema.
- Proporcionar únicamente información básica y necesaria, no es obligatorio llenar todos los campos. Recuerde que cualquier dato personal es valioso para los estafadores.
- Nunca dar el correo electrónico y dirección del trabajo ni realizar compras a través de equipos dados por la compañía en la que labora. Esto pondría en riesgo no solo a una persona sino que a toda una organización.
- Utilice la tarjeta de crédito en lugar de una tarjeta de débito o efectivo, ésta le proporcionará una mejor protección y respaldo en caso de cualquier problema.
Un buen fin, una buena compra
Si bien esta época del año es favorable para realizar compras y transacciones financieras, ya sea en línea o en un comercio, también es indispensable poner atención en:
- Datos personales – Cualquier dato personal es valioso para los estafadores. Aunque no puedan hacerse con los datos de una tarjeta pueden usar otros para hacerse pasar por una persona en particular. Datos como la fecha de nacimiento o el nombre de familiares son muy populares en las empresas para la identificación cuando se mandan mails o se llama por teléfono. Si el estafador consigue estos datos puede llamar al banco y saltarse los controles de seguridad fácilmente.
“Si alguien le solicita datos personales tenga estas tres cosas en cuenta: quién pregunta, para qué lo están preguntando y por qué lo necesitan”, advierte Limor Kessem. “También hay que cuestionarse si los datos personales que le están preguntado son proporcionales a la acción que se quiere realizar. Por ejemplo, si alguien le llama ofreciéndole un nuevo teléfono celular ’gratis’ y a continuación comienza a preguntar todo tipo de datos personales… ¡debería sospechar y poner atención!”.
- Ofertas con trampa – Una de las prácticas favoritas de los delincuentes es lanzar campañas fraudulentas: «Compre desde esta web de descuentos y ahorre en sus compras». ¿Quién no queda tentado por los grandes descuentos en la situación económica actual? Pero es recomendable comprobar quién es el vendedor antes de entregarse a una compra demasiado buena para ser cierta.
Acciones como las «pruebas gratis» a menudo están acompañadas de condiciones y términos en letra pequeña que le atrapan en grandes pagos. “Si le ofrecen una prueba gratuita de un producto, pero le solicitan los datos de su tarjeta de crédito para sufragar los costos de envío, es que la prueba no es gratuita y probablemente le supondrá un gran gasto de envío o de cancelación. Este tipo de estafas a menudo terminan con el cliente teniendo que cancelar la tarjeta, asumiendo los problemas acarreados por la pérdida de solvencia y en muy raras ocasiones, en la no recuperación del dinero a causa de las inteligentes cláusulas y condiciones introducidas en la letra pequeña,” comenta Limor.
- Virus Troyanos – Desconfíe de los correos electrónicos que hagan referencias como: «Es genial, haz click aquí», ya que suelen redirigirle a una página web que infectará su PC con un virus. Ni siquiera es necesario hacer clic siempre en un enlace específico. Los virus actuales recurren a técnicas para redireccionar e infectar su equipo de forma automática con sólo visitar la página.
Visite sólo sitios en los que confíe y utilice las últimas versiones del buscador que emplee. Las últimas versiones de Internet Explorer, Google Chrome y Mozilla Firefox incorporan controles de seguridad de la web y ayudan a protegerse frente a páginas no seguras.
- Correos electrónicos «oficiales» – El correo electrónico sigue siendo la vía favorita para los engaños basados en Internet. Un email fraudulento puede ser alterado para parecer un mensaje oficial procedente de una empresa fiable. El correo suele incluir un enlace que redirige al usuario hacia una página web en la que se le piden varios datos personales. Muy pocas empresas recurren al correo electrónico como medio de comunicación oficial y generalmente sólo lo usan para enviar publicidad. Sea cauteloso ante cualquier correo con aspecto «oficial» procedente de su banco o de una tienda on-line