Están surgiendo cada vez más empresas que lanzan computadoras que siguen la ruta que están marcando las tablets de grandes dimensiones, como es el caso del iPad Pro.
Actualmente, la atención se está centrando en la nueva Spectre X2 de HP, una PC híbrida que compite con la Surface Pro 4 y con el iPad Pro.
Sin embargo, al parecer no hay una característica técnica determinante que diferencie a HP de Microsoft y Apple. La diferencia más significativa radica fundamentalmente en el sistema operativo.
El reto para Apple es demostrar que iOS tiene capacidades para realizar tareas más complejas, y
Windows 10 también debe hacer patente que es un sistema capaz de usarse a manera de una tablet, por ejemplo, a la hora de recostarse en un sofá y navegar en Internet.
La Spectre X2 de HP, por su parte, ha logrado avances importantes, pero aún parecen insuficientes. Su aspecto parece ser un tema delicado debido a su volumen, sobre todo si se compara con la Surface Pro 4.
En cuanto al precio, el iPad Pro compite con cierta ventaja al comercializarse en 799 euros en su versión de 32 GB, comparado con la Surface que cuesta 999 euros y la Spectre que cuesta 1,399 euros.
Ante la falta de diferencias más significativas, la capacidad de trabajar con periféricos parece ser la variable más relevante, lo cual es la principal carencia de Apple cuando se realizan ciertas tareas, como el hecho de que sea casi imposible transferir datos directamente del iPad Pro a un disco duro externo.
Esto es importante sobre todo en trabajos creativos que generan archivos de gran tamaño y se requiere transferirlos por WiFi.
Por otra parte, el iPad Pro sólo permite trabajar con dos aplicaciones a la vez en pantalla; iOS 9 no dispone de un gestor de archivos, y alguien seguirá extrañando un Trackpad o un ratón a la hora de escribir un texto o crear una hoja de cálculo, por ejemplo.
Un elemento que será decisivo en la diferenciación competitiva de estos dispositivos es hasta qué punto los desarrolladores estarán dispuestos a extraer sus potencialidades.
Con información de El País