Con la aplicación MyShake en el móvil, un sensor de movimiento puede percibir los terremotos, su duración y amplitud, para enviar los datos recopilados y la ubicación del teléfono móvil al laboratorio de sismografía en Berkeley, para su análisis.
Red sísmica mundial
MyShake es una aplicación que mejor funcionará si se suman más personas a su utilización, de tal manera que se pueda crear una red sísmica mundial, en otras palabras, un sismógrafo colectivo que eventualmente puede advertir a los usuarios en lugares lejanos, movimientos sísmicos con oportunidad.
‘Esta aplicación puede prevenir algunos segundos antes los terremotos. Para muchos países en desarrollo, propensos a movimientos telúricos como Nepal o Perú, MyShake podría, potencialmente, advertir a las personas afectadas, valiosos segundos antes y, de ser posible, una vida segura’, explica Deutsche Telekom en un comunicado reciente.
‘Estos países tienen actualmente sólo una escasa red sísmica subterránea, o bien un sistema de alerta temprana y en algunos casos no cuentan con ninguna solución, pero sí tienen millones de usuarios de teléfonos inteligentes’, recalca la compañía alemana.
Si bien el sensor de movimiento de un teléfono, o acelerómetro, es menos sensible que un sensómetro en tierra, se pueden registrar terremotos por encima de una magnitud de cinco a menos de 10 km.
Se estima un volumen de 16 millones de teléfonos inteligentes sólo en California y de 1,000 millones en todo el mundo, con lo cual se puede lograr una red gigantesca.
MyShake se puede descargar en forma gratuita desde Google Play Store, y se tiene prevista una aplicación para iPhone, de acuerdo con Deutsche Telecom.
Con información de Bloomberg