Apple presentó un registro de patente que podría eliminar el teclado físico en las computadoras MacBook.
En el lugar del teclado se colocaría una superficie con control háptico (táctil) sobre el cual el usuario pulsaría en una de las teclas dibujadas y plenamente configurables.
En esta propuesta, Apple aprovecha la tecnología Force Touch proveniente del Apple Watch, mediante la cual un sensor reacciona a la presión realizada sobre una superficie plana, proporcionando la sensación de hundimiento que produce un teclado físico.
Eliminando el teclado físico, se podría crear una portátil con características mucho más cercanas al formato de una tablet y sobre todo, meter en dificultades en sus rivales que tendrían que ingeniárselas para encontrar la manera de reducir el chasis de sus portátiles para competir con Apple.
Aún más, la compañía californiana se acercaría al esquema de un producto para todos los mercados que aplica ya en los dispositivos con sistema iOS, a excepción de los conectores de los cargadores.
Algo importante es que con esta patente, Apple apela a la personalización de su dispositivo, ya que permite que sea el usuario el que configure el teclado que desee y éste se proyecte desde la parte inferior en la superficie táctil perforada. La idea es que el teclado sea un elemento más que el usuario pueda configurar en función del uso que se vaya a dar al equipo.
Desde luego, este cambio significaría una notable reducción de espacio y consecuentemente de su peso, ya que los teclados por muy compactos que sean, siempre requieren de un grosor para que la parte mecánica lleve a cabo su recorrido.
Por otro lado, este cambio disminuiría enormemente los costos de logística y almacenamiento de los diferentes teclados regionales, lo cual es un quebradero de cabeza para los fabricantes de computadoras que tienen que hacer previsiones de las ventas para adecuar sus almacenes de producto terminado.
Falta por conocer la experiencia de uso de un teclado con estas características, sin embargo cada vez más los esfuerzos se concentran en acercar el mundo táctil al físico; además de que los consumidores esperan ya un rediseño radical de la MacBook, para calmar la sed de una demanda que espera nuevas ideas dentro de un mercado que ya se percibe veterano y aburrido de ver siempre los mismos planteamientos.
Con información de El País