Las turbulencias cuestan a las aerolíneas aproximadamente 100 millones de dólares cada año, según el Proyecto de Prevención de Accidentes Climáticos de la NASA.
Ante este panorama, la linea aérea estadounidense Delta diseñó la aplicación Flight Weather Viewer, que proporciona a los pilotos gráficos en tiempo real sobre las observaciones de turbulencia y las previsiones para el vuelo.
La aplicación, desarrollada en colaboración con Basic Commerce and Industries (BCI), permite a los pilotos cargar su plan de vuelo, ubicar las turbulencias en un mapa 3D y determinar su intensidad con un código de color y una escala 0-100.
El sistema utiliza algoritmos especiales, desde sensores de aviónica instalados en más de 300 aeronaves de la flota de la aerolínea, para combinar los datos del acelerómetro vertical con los datos del estado atmosférico, que incluye factores tales como cabeceo, balanceo y la velocidad del viento para generar informes de turbulencia.
Estos informes son realimentados en los modelos de predicción y puestos a disposición en la aplicación en tiempo real.
Los pilotos pueden establecer indicadores de alerta a lo largo de su ruta produciendo notificaciones sonoras, al igual que visuales de señalización cuando una zona de turbulencia está por venir, en qué momento la señal del cinturón de seguridad debe estar encendida y cuándo la cabina necesita ser asegurada.
El sistema opera en tiempo real gracias a la conectividad WiFi en vuelo de Gogo, en lugar de hacerlo a través del sistema tradicional de enlace de datos digital ACARS que ha estado en vigor desde finales de 1970.
En la fase 2 del proyecto de despliegue de la aplicación, los desarrolladores esperan añadir la detección de otros tipos de perturbaciones meteorológicas, tales como rayos eléctricos, granizo e incluso cenizas volcánicas.