Alrededor de 1,900 empleados de Airbnb en todo el mundo se verán afectados por un recorte de personal provocado por el desplome global de viajes a causa del coronavirus, según explicó el director ejecutivo Brian Chesky. El último día de esos empleados será el lunes 11 de mayo.
‘Estamos viviendo colectivamente la crisis más desgarradora de nuestra vida y, a medida que comenzó a desarrollarse, los viajes globales se paralizaron’.
‘El negocio de Airbnb se ha visto muy afectado y se prevé que los ingresos de este año sean menos de la mitad de lo que ganamos el 2019’, escribió Chesky.
La startup con sede en San Francisco, estaba lista para hacer la acción más taquillera del año; ha recaudado 2,000 millones de dólares en capital y ha reducido progresivamente los costos en un intento por capear la depresión.
‘Si bien sabemos que el negocio de Airbnb se recuperará completamente, los cambios que sufre no son temporales y de corta duración. Debido a esto, necesitamos hacer cambios más fundamentales, reduciendo el tamaño de nuestra fuerza laboral en torno a una estrategia comercial más enfocada’, escribió Chesky.
Como resultado, Airbnb hará una pausa en sus esfuerzos de transporte y sus inversiones en hoteles y viajes de lujo, informó.
En el mundo posterior a la pandemia, Chesky está apostando a que los viajeros querrán opciones más cercanas a su hogar, más seguras y asequibles.
‘Cuando comenzamos Airbnb, se trataba de pertenencia y conexión. Esta crisis ha agudizado nuestro enfoque para volver a nuestras raíces, volver a lo básico’, externó el directivo.