Alphabet, la empresa matriz de Google, reportó un aumento del 15% en sus ganancias durante los primeros nueve meses del año, alcanzando un total de 53,108 millones de dólares.
Este crecimiento ha sido impulsado por avances significativos en el campo de la Inteligencia Artificial (IA).
La compañía estadounidense informó que su facturación acumulada en los tres trimestres que finalizaron el 30 de septiembre ascendió a 221,084 millones, lo que representa un aumento del 7% en comparación con el mismo período del año anterior, según se detalla en un comunicado oficial.
En lo que respecta al tercer trimestre, el cual es seguido de cerca por los analistas de Wall Street, Alphabet reportó un beneficio de 19,689 millones de dólares y una facturación de 76,693 millones. Estos datos representan incrementos interanuales del 42% y del 11%, respectivamente.
El director ejecutivo de la empresa, Sundar Pichai, resaltó estos resultados recientes y los atribuyó a las innovaciones en la IA aplicadas a las Búsquedas (Google), YouTube, Cloud, los dispositivos Pixel y otros servicios.
Los ingresos relacionados con la publicidad, en su mayoría provenientes de Google, aumentaron un 9% interanual, llegando a 59,647 millones de dólares, mientras que YouTube contribuyó con 7,952 millones, un 12% más que el año anterior.
Destacando el crecimiento de Google Cloud, su servicio de nube, el cual experimentó un aumento del 22% en su facturación, alcanzando los 8,411 millones de dólares. Esto permitió a la división reportar ganancias, en contraste con las pérdidas del año anterior.
A pesar de estos datos positivos, algunos analistas señalaron que los ingresos generales estuvieron por debajo de las expectativas, particularmente en el caso de Google Cloud, donde Amazon y Microsoft lideran el mercado, un segmento crucial para el desarrollo de la IA.
Adicionalmente, Alphabet informó que se reflejan en sus resultados cargos relacionados con recortes de empleados realizados a lo largo del año (2,100 millones de dólares), la optimización de sus oficinas (649 millones) y la depreciación de sus instalaciones (207 millones).
Los resultados, publicados al cierre de Wall Street, recibieron una respuesta negativa por parte de los inversionistas, y las acciones de la empresa cayeron más del 5% en las operaciones electrónicas. A pesar de ello, desde el inicio del año 2023, el valor de la compañía ha aumentado en un 58%.
