Amazon elevó el salario mínimo para todos los empleados de Estados Unidos a 15 dolares por hora, una medida que se vio como una respuesta a las presiones políticas.
La compañía dijo que también está dando aumentos a cada empleado de operaciones y servicio al cliente en trabajos por horas, incluyendo a tiempo parcial y empleados temporales.
Los trabajadores de Flex no son elegibles porque son contratistas, se informó.
El gigante del comercio electrónico depende de una variedad de empleados del gobierno, operadores de envíos internacionales como UPS y FedEx, operadores locales y su propia armada de almacenes, aviones y camiones para entregar paquetes lo más rápido posible a los clientes.
Amazon Flex es una de las adiciones más recientes, pero ya cuenta con personas en más de 50 ciudades en Estados Unidos que manejan paquetes en su tiempo libre.
La expansión de la compañía y su implacable impulso hacia el eficiencia, a veces expensas de su propia fuerza laboral, lo convierten en un objetivo para los críticos.
Derrotar a Amazon es una de las pocas plataformas bipartidistas en la política estadounidense que provoca la ira tanto del presidente Donald Trump como del senador Bernie Sanders.