Por ahora, Amazon es el líder en la nube pública, pero cada empresa tiene sus puntos fuertes. Democratizar el acceso a un potente software de inteligencia artificial será el último campo de batalla y podría decidir qué gigante tecnológico resultará el ganador final en un mercado de infraestructuras en la nube con un valor de 25,000 millones de dólares este año, de acuerdo con IDC.
‘Hay una nueva generación de aplicaciones que requieren ciencias de datos y machine-learning mucho más intensas. Se está generando una carrera para ver quién va a proporcionar las herramientas para eso’, comentó Diego Oppenheimer, director ejecutivo de Algorithmia, una startup que maneja algoritmos que hacen algunas de las mismas funciones que realizan Microsoft, Amazon y Google.
Las herramientas se están generalizando y podrían transformar el trabajo a medida que una mayor automatización permita a las empresas hacer más con la misma fuerza de trabajo.
A medida que las empresas tratan de analizar, optimizar y predecir mejor todo, desde los ciclos de ventas hasta el desarrollo de productos, se están intentando técnicas de inteligencia artificial como el aprendizaje profundo, un tipo de aprendizaje automático que ha producido resultados impresionantes en los últimos años.
IDC espera que el gasto en tales sistemas cognitivos e inteligencia artificial aumente 55% al año durante los próximos cinco años. La parte basada en la nube debería crecer aún más rápido, según el analista de IDC, David Schubmehl.
Unas escuelas en la India y Tacoma, Washington, están usando Azure Machine Learning de Microsoft para predecir qué estudiantes pueden abandonar; los agricultores de la India lo están usando para calcular cuándo plantar cultivos de cacahuate, basados en datos de monzón; Johnson & Johnson está utilizando el algoritmo de aprendizaje automático Jobs de Google para combinar las habilidades, preferencias, antigüedad y ubicación de los candidatos para hacer coincidir a los solicitantes de empleo con los roles adecuados.
Google, que ha llegado tarde al negocio de la nube pública, está utilizando su experiencia de inteligencia artificial y recursos computacionales masivos para ponerse al día. Un nuevo Advance Solutions Lab permite a las empresas externas participar en sesiones de capacitación con expertos de aprendizaje automático que Google dirige para su propio personal. De hecho USAA fue la primera empresa en participar, aprovechando a los ingenieros de Google para ayudar a construir un software para esta compañía de servicios financieros.
Los tres líderes de la nube pública también han puesto disponibles capacidades como reconocimiento de voz e imagen a los clientes para que puedan diseñar aplicaciones que se conecten a estas capacidades de inteligencia artificial.
‘Usted puede construir un software que sea cognitivo, que pueda sentir la emoción y entender su intención, reconocer el habla o lo que aparece en una imagen. Proporcionamos todo esto en la nube para que los clientes puedan usarla como parte de su software’, comentó Joseph Sirosh, Vicepresidente de Microsoft.
Amazon, por su parte, introdujo en noviembre herramientas similares: Rekognition, que puede decirle a los usuarios lo que hay en una imagen; Polly, que convierte el texto en un discurso de tipo humano; y Lex -basado en el popular servicio Alexa de la compañía- utiliza el reconocimiento de voz y texto para crear bots convencionales.
Joseph Sirosh, de Microsoft, comentó que la nube puede ser valiosa para las compañías que no quieren invertir en poder de procesamiento para comprimir los datos necesarios para las aplicaciones basadas en inteligencia artificial.
Al parecer, Google tiene la mayor credibilidad basada en las herramientas de que dispone. Microsoft es el que realmente será capaz de convencer a las empresas de hacerlo y Amazon tiene la ventaja de que la mayoría de los datos corporativos en la nube están en AWS, dijo Oppenheimer de Algorithmia.
El mercado juzgará sus fortalezas en la medida que crezca y la competencia se intensifique.
Con información de Bloomberg