Ante el requerimiento del Donald Trump de pagar más al Servicio Postal de Estados Unidos en la entrega de paquetes a los consumidores, Amazon podría utilizar la cadena de tiendas de Whole Foods como centros de distribución.
Sin embargo, reducir la dependencia de Amazon del USPS no sería simple, y tal vez ni siquiera sea necesario, pero el minorista en línea más grande del mundo está preparando una operación de envío que algún día podría manejar la mayoría de sus entregas y enfrentar así la irrupción de Trump.
‘Por ahora, Whole Foods tiene 460 ubicaciones que pueden usar cada vez más para expandir su capacidad de logística’, según Tom Forte, analista de DA Davidson. Mientras tanto, agrega que Amazon podría pagar a FedEx y United Parcel Service para manejar más entregas ‘mientras construye su propia red de entrega’.
El martes pasado, Trump inició la refriega con un tuit que decía: ‘Tengo razón acerca de que Amazon le cuesta a la Oficina de Correos de Estados Unidos grandes cantidades de dinero por ser su repartidor. Amazon debe pagar por estos costos y no hacerlos pagar al contribuyente estadounidense’.
Más tarde Trump dijo, citando un estudio, que el Gobierno de Estados Unidos pierde 1.47 dólares cada vez que se entrega un paquete para Amazon.
Ante esta situación, las acciones de Amazon cayeron un 12%, borrando 75,000 millones de dólares de valor de mercado, desde que la semana pasada se conocieron las noticias sobre la ‘obsesión’ de Trump contra la compañía, seguidas de tuits sobre impuestos a las ventas, cierres de minoristas y tarifas postales.
Pero el martes, los inversionistas comenzaron a ignorar los ataques del presidente, lo que hizo que las acciones subieran cerca de un 1% en Nueva York.
Según Forte, ‘si el Servicio Postal ya no fuera una opción para Amazon, no los pondría en desventaja, porque continuarían desplegando sus propios esfuerzos de entrega y tienen muchas más oportunidades con Whole Foods’.