Apple anunció una inversión de 1,000 millones de euros en Alemania durante los próximos tres años, con el objetivo de expandir sus operaciones en Múnich a través de la creación de un nuevo centro para el diseño de chips.
Los laboratorios en Múnich son el mayor centro de desarrollo de Apple en Europa, centrado en las tecnologías inalámbricas y 5G.
En el verano de 2019 la firma californiana adquirió la división de telefonía móvil y módems de Intel.
En la ciudad alemana trabajan actualmente 1,500 ingenieros de 40 países en el área de diseño de administración de energía, para que cada parte de un dispositivo tenga suficiente energía en todo momento.
Tim Cook, CEO de Apple, se mostró entusiasmado por todo lo que los equipos de ingeniería en Múnich descubrirán, ‘desde la investigación de nuevas posibilidades para la tecnología 5G, hasta una nueva generación de tecnologías que proporcionarán más potencia, velocidad y conectividad’.
La compañía de la manzana ha tenido una fuerte dependencia de otros fabricantes de chips como Intel y Qualcomm, pero ahora quiere producir por sí mismo los semiconductores más importantes para sus dispositivos como el móvil iPhone, el iPad y las Mac.