El arranque del año 2024 ha sido testigo de un notable aumento en los ataques de denegación de servicio (DDoS).
Según el último informe de amenazas de Cloudflare, que recopila datos del primer trimestre, se han registrado 4.5 millones de estos ataques, marcando un incremento del 50% en comparación con el mismo período del año anterior.
El informe destaca no solo la preocupante cantidad de ataques, sino también su intensidad y sofisticación, y subraya la capacidad de adaptación y evolución de los agentes de amenazas.
Este incremento refleja un panorama de riesgo creciente que afecta a una amplia gama de entidades, desde pequeñas empresas hasta grandes infraestructuras estatales.
El reporte también destaca el aumento del 80% en los ataques contra sistemas de nombres de dominio (DNS), esenciales para el funcionamiento de Internet. Estos ataques no solo buscan interrumpir servicios individuales, sino debilitar la estructura misma de la red global.
En un contexto donde la geopolítica influye cada vez más en la ciberseguridad, ciertos eventos han demostrado cómo las tensiones políticas pueden traducirse en acciones cibernéticas. Por ejemplo, tras la reciente adhesión de Suecia a la OTAN, los ataques DDoS en esta región han aumentado un 466%.
El informe también resalta la persistencia de amenazas conocidas, como la botnet Mirai, originada en 2016. A pesar de las expectativas de su disminución con el tiempo, las variantes de Mirai continúan siendo responsables de un porcentaje significativo de los ataques DDoS.
A medida que avanzamos en 2024, los datos sugieren que la frecuencia y gravedad de estos ataques podrían seguir aumentando, afectando a sectores cada vez más amplios de la economía y la vida cotidiana.
