Las ganancias netas de Samsung Electronics en el tercer trimestre cayeron un 16.8% interanual, como consecuencia de los problemas con el Galaxy Note 7 que fue llamado masivamente a revisión en septiembre antes de su retirada del mercado.
El beneficio neto de la firma surcoreana alcanzó 4.54 billones de wones ( 3,995 millones de dólares) entre julio y septiembre, reportó la propia compañía.
Samsung Electronics también redujo su beneficio operativo en el mismo período un 29.6% en términos interanuales hasta 5.2 billones de wones (4,575 millones de dólares).
En cuanto a las ventas, la firma consiguió 47.8 billones de wones (42,000 millones de dólares) en el mismo periodo, un 7.5% menos que en el mismo trimestre de 2015.
‘El negocio de telefonía móvil vio caer significativamente sus beneficios respecto al trimestre anterior debido a los efectos de la suspensión del Galaxy Note 7’, explicó en un comunicado la empresa con sede en Seúl.
La división de telefonía móvil de Samsung, normalmente la más rentable, publicó un beneficio operativo de 1,000 millones de wones (880 millones de dólares) en el tercer trimestre, en comparación con los 2.4 billones de wones (2,110 millones de dólares) del mismo período del año pasado.
La mayor parte de los beneficios de la firma en el tercer trimestre correspondieron a la unidad de semiconductores, que acumuló un beneficio operativo de 3.37 billones de wones (2,970 millones de dólares), si bien este fue un 7.9% menor en comparación a julio-septiembre de 2015.
La empresa espera un repunte en sus beneficios por el aumento de la demanda de sus smartphones Galaxy 7 y 7 Edge en la temporada alta de compras navideñas y la salida al mercado de nuevos modelos de gamas media y baja, según el comunicado.
EFE