La instalación, que se puso en uso este viernes y es conocida como la línea troncal Jing-Hu, es la primera de su categoría en el mundo para llevar a cabo telecomunicaciones cuánticas seguras.
Jing Hu, que conecta los principales puntos de la red de comunicaciones cuánticas seguras del país asiático (Pekín, Jinan, Hefei y Shanghái), está conectada al también primer satélite cuántico del planeta, el Micius, lanzado por China en agosto de 2016.
El sistema encripta los datos que se quieren transmitir gracias a claves cuánticas antes de ser enviados, de modo que la encriptación se muestra posteriormente como un montón de códigos desordenados en la red pública. Para descifrar dichos datos una vez recibidos éstos se descifran utilizando claves de cifrado.
Gracias a la conexión de Micius con una estación terrestre de comunicaciones en Pekín, un grupo de expertos chinos pudo mantener ayer una videoconferencia con el físico cuántico Anton Zeilinger, que se encontraba en otra base de Austria.
«La primera videollamada en tiempo real a través de comunicación cuántica intercontinental ha marcado un gran día para la ciencia», afirmó Bai Chunli, presidente de la Academia China de Ciencias (CAS, en inglés).
Por su parte, Zeilinger señaló que «por primera vez, hemos demostrado que la distribución de claves de cifrado intercontinental se puede aplicar en la red de área amplia».
«La conexión del satélite a la red óptica ha demostrado que nuestros satélites pueden ajustarse con exactitud a la red terrestre», agregó.
La tecnología de las comunicaciones cuánticas está determinada por las propiedades subatómicas de los fotones, es decir, que permite a los usuarios codificar la información en el estado cuántico específico de estas partículas, a diferencia de los métodos convencionales que usan ceros y unos para cifrar información.
Con este sistema los usuarios a ambos lados de la línea serán alertados cuando haya una grieta en la seguridad de la red, lo que hace este tipo de comunicaciones sean idóneas para la protección de datos gubernamentales o del sector financiero.
En China, tanto entidades financieras -Banco de Comunicaciones o el Banco Industrial y Comercial- como grandes corporaciones -Alibaba- ya han utilizado esta red.
EFE