El gobierno de China respondió a las intenciones de compra de Microsoft asegurando que no aceptará el ‘robo’ de una empresa tecnológica como TikTok por parte de Estados Unidos y amenazó con tomar represalias ante la presión ejercida por Washington para que la compañía logre cuanto antes un acuerdo de venta sobre sus operaciones en el país norteamericano.
Por su parte, la propietaria de la red social, ByteDance, comunicó que seguían trabajando con la administración del presidente Donald Trump para lograr un acuerdo después de que éste anunciara que prohibirá el uso de TikTok.
Si bien Pekín aseveró que será precavido a la hora de imponer restricciones o medidas similares contra compañías estadounidenses en suelos chinos, ha hecho hincapié en que existen ‘numerosas formas’ de tomar represalias.
Microsoft, por su parte, señaló que se encuentra inmersa en conversaciones sobre la posibilidad de comprar partes de TikTok, después de que Trump diera a ByteDance 45 días hasta el 15 de septiembre, para lograr un acuerdo de venta.
El magnate había amenazado con prohibir la app china por motivos de seguridad, unas declaraciones que siguen de cerca a las realizadas por el secretario de Estado, Mike Pompeo, quien señaló durante el fin de semana que Washington podía tomar medidas contra TikTok y otras empresas chinas que pudieran estar compartiendo los datos de sus usuarios con el gobierno del país asiático.
El comité de inversiones extranjeras de Estados Unidos inició una investigación contra TikTok por la preocupación de las autoridades estadounidenses sobre si la app supone un riesgo a la seguridad nacional; en concreto, mostraban recelos sobre si TikTok podría recolectar datos de los usuarios estadounidenses que acabaran en manos del gobierno chino, a pesar de que la compañía asegura que almacenará sus datos fuera de China y que se resistiría a apropiarse de la información.
Por su parte, expertos de ciberseguridad indicaron que el potencial de riesgo para la seguridad nacional que representa la aplicación es, sobre todo, teórico y que no hay ninguna evidencia que sugiera que los datos de los usuarios de TikTok puedan estar comprometidos por la inteligencia China.
Microsoft sopesa las operaciones de TikTok en Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, mientras que no cierra la puerta a las posibilidades de que otros potenciales inversores estadounidenses se involucren en esta adquisición.