A medida que el COVID-19 se expande en todo el país impactando como nunca a todos los sectores sociales, industrias y vida cotidiana, la tecnología se posiciona como un aliado para optimizar los servicios de salud pública.
Este en un momento en que tanto la población como las instituciones juegan un papel muy importante para reducir la probabilidad de exposición y transmisión del coronavirus.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, hasta el corte del 23 de abril se registraban 11,633 casos confirmados en varias entidades del país, mientras que 7,588 personas permanecían en estado “sospechoso”.
Ante ello, se pueden señalar algunas recomendaciones en las que la tecnología del 911 puede aminorar las preocupaciones ante esta crisis:
1. Geolocalización y visualización de contagios
En algunos estados del país los servicios de emergencia del 911 han incorporado la tecnología israelí, la cual permite implementar de forma inmediata el monitoreo y el rastreo de personas con síntomas de COVID-19, reduciendo el riesgo de exposición, acelerando la atención y minimizando la probable propagación.
Una de esas funciones es la geolocalización con precisión de los individuos y su identificación por áreas. De esta manera, las autoridades pueden ver ubicaciones a través de mapas de “calor”, lo que permite identificar áreas de mayor incidencia y focalizar los esfuerzos. Este mecanismo de geolocalización se da bajo la autorización expresa de los ciudadanos.
2. Videollamadas desde el 911 ante COVID-19
Otras de las funciones es la de videollamada con personas que presentan síntomas, lo que ayuda a reducir las oportunidades de contagio por contacto y proporciona al equipo médico una salvaguarda para su integridad, y junto con la aplicación de un riguroso protocolo médico, se puede determinar si una persona está infectada o no.
3. Chat instantáneo para comunicación efectiva
Como parte de los esfuerzos para el monitoreo ante el COVID-19, los chats instantáneos son una herramienta muy efectiva para comunicarse con los posibles pacientes que, por alguna razón, no pueden comunicarse verbalmente (personas sordas, con debilidad auditiva o con trastorno del habla). Esta solución ya está presente en las llamadas al 911.
Sin duda, en un mundo conectado, digital, como en el que vivimos, la tecnología funge como un gran aliado ante momentos de contingencia, poniendo al alcance de las personas alternativas para asegurar una mejor protección ante desafíos imprevistos como el coronavirus.
Ahora más que nunca, estas herramientas son esenciales para salvar vidas y restablecer el día a día de millones de personas.
Por Abelardo Tous-Mulkay, director general de Carbyne México
