El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) desarrolló una herramienta que puede analizar los estados de ánimo y sentimientos reflejados por usuarios de Twitter.
El proyecto se denomina ‘Estado de ánimo de los tuiteros en México’ y busca, según el INEGI, ‘interpretar la emotividad que subyace a los mensajes que se publican en la plataforma digital’.
El instituto pretende con esta práctica medir el bienestar de la población más allá del producto interior bruto (PIB), y las encuestas alternativas, analizando ‘el bienestar inferido a partir de la carga anímica implícita en los mensajes publicados’.
El INEGI considera que este es el ejercicio de generación de información estadística con más alta frecuencia que haya realizado hasta ahora y, por sus características, ‘una herramienta única a nivel mundial’.
¿Cómo funciona?
Para llevar a cabo el análisis se entrenó a una computadora a partir de las técnicas de Machine Learning, con lo cual se consigue replicar el criterio humano en la identificación de la carga emotiva de cada tuit: negativa o positiva.
Cada tuit es clasificado y a partir de ello se construye un indicador que relaciona el número de tuits positivos por cada tuit asociado con una carga emotiva negativa.
A este indicador se le denomina ‘cociente de positividad’ y se define como ‘el número de tuits positivos entre el número de tuits negativos para una determinada área geográfica en un periodo de tiempo determinado’.
Así, el ‘Estado de Ánimo de los Tuiteros en México‘ reporta un cociente de positividad a partir de enero de 2016 con actualización automática diaria.
Este puede ser visualizado para el país en su conjunto y para cada una de sus entidades federativas con frecuencia anual, trimestral, mensual, semanal, diaria e incluso por hora.
La herramienta está disponible en la página del INEGI en internet en la sección de investigación y estadísticas experimentales.
El nivel actual del ‘cociente de positividad’ es de 2.0 y se mantuvo estable desde diciembre con un 67% de tuits positivos y un 33% de negativos.
Llama la atención que durante el mes de septiembre de 2017 (durante el sismo) el índice bajó de 2.05 a 1.9.
EFE