Recientemente fue presentado en la revista Device, un nuevo dispositivo creado con tela y diseñado para llevarlo en la muñeca o el brazo, capaz de guiar al usuario a través de sutiles toques en su brazo.
Las pruebas demuestran que los usuarios comprenden correctamente la dirección indicada en un 87% de las ocasiones.
El dispositivo, desarrollado por un equipo internacional liderado por la Universidad Rice, utiliza pequeños golpes de aire en lugar de componentes electrónicos, lo que lo hace más ligero y compacto.
‘Esperamos que este dispositivo sea utilizado por personas que necesiten o deseen recibir información de manera discreta y que pueda integrarse fácilmente en la ropa u otros dispositivos wearables’, señaló Marcia O’Malley, una de las autoras del estudio de la Universidad Rice.
Este tipo de dispositivos puede ser beneficioso para personas con pérdida auditiva, así como para profesionales como cirujanos, pilotos y soldados que a menudo están bombardeados con información visual y auditiva, según destacó la Universidad.
Mientras que los dispositivos que utilizan señales visuales o sonoras son comunes en la vida cotidiana, los que se basan en señales táctiles aún son poco comunes debido a su necesidad de hardware voluminoso y pesado.
El desafío era desarrollar un dispositivo portátil, ligero y cómodo hecho de materiales textiles. Esto fue complicado no solo debido a las diferencias en la forma de los brazos de las personas, sino también porque cada individuo tiene su propia percepción de cuánta presión es la adecuada y cuándo debe aplicarse.
Luego de probar el desempeño de las muñequeras textiles hápticas en un estudio de laboratorio con personas, los investigadores se propusieron evaluar cómo estos dispositivos podrían ayudar a los usuarios en un entorno real.
Para hacerlo, integraron la muñequera en una camisa y la complementaron con un cinturón textil que sostenía componentes adicionales, convirtiendo el dispositivo en portátil.
Un miembro del equipo enviaba señales al dispositivo que llevaba el usuario para guiarlo en una ruta de un kilómetro.
‘Nos sorprendió que el usuario pudiera navegar por las calles de Houston y luego realizar trazados de Tetris de 50 metros de longitud en un campo abierto, con una precisión del 100% en la recepción e interpretación de las señales táctiles de navegación’, agregó otro de los autores de la investigación, Daniel Preston.
Otra prueba implicó que el usuario interpretara correctamente y a tiempo los toques que recibía en la muñeca mientras conducía un scooter eléctrico sobre pavimento, aceras de hormigón y caminos de grava.
Preston señaló que un mayor desarrollo del dispositivo permitirá mejorar la capacidad de transmitir señales aún más complejas que el usuario pueda discernir de manera fácil y natural.