La televisión estatal estará instalada totalmente en Cuba en el año 2021, cuando se aplicará el ‘apagón analógico’, luego de transitar por tres etapas para introducir ese sistema de trasmisión que traerá ventajas como mayor calidad en el servicio, según explicaron hoy expertos de la isla.
El ministerio cubano de Comunicaciones (MIC) anunció esta semana que a partir de junio próximo comenzarán las pruebas de trasmisión de señales en una ‘zona de demostración’ del servicio en La Habana para introducir progresivamente la televisión digital en la isla.
Para esa transformación tecnológica Cuba utilizará la norma china de Transmisión Digital Terrestre Multimedia (DTMB, por su sigla en inglés), considerada como «la más beneficiosa para los objetivos y necesidades del país», según explicó el director general del Instituto de Investigación y Desarrollo de Telecomunicaciones (LACETEL), Glauco Guillén, en un programa de la televisión estatal.
También refirió que el Gobierno chino concedió a la isla el uso de esa norma de propiedad intelectual, con exención de pago, y además donó equipos que emplearán en las pruebas.
Sobre el proceso de implementación del nuevo sistema, el director general de la empresa de Radiodifusión y Radiocomunicaciones, Justo Moreno, indicó que en una primera etapa de cinco años, coexistirán el sistema de trasmisión analógico y el digital, y facilitará la «adaptación» de todos los actores del programa al «transito progresivo».
En la segunda etapa a partir del año 2016 quedará instalada la cobertura necesaria para el servicio y en la última se ya en el 2021 concluirá el proceso con el ‘apagón analógico’.
También se conoció que durante el ensayo del servicio de televisión digital terrestre en barrios seleccionados de la capital cubana, se sumarán tres nuevos canales a los cinco que existen a nivel nacional actualmente, Cubavisión, TeleRebelde, los Educativo 1 y 2, y Multivisión.
En la ‘zona de demostración’ del servicio se distribuirán cajas decodificadoras -que permiten recibir y visualizar la señal digital en los televisores analógicos-, con el fin de lograr una adecuada dispersión geográfica y diferentes condiciones de recepción dentro de toda el área de La Habana.
El director técnico del Instituto Cubano de Radio y Televisión, Eusebio Garnier, señaló que la aplicación del sistema digital mejorará la calidad de la programación y las transmisiones.
Avanzó que entre los beneficios para los televidentes permitirá sintonizar estaciones de radio con mejor sonido, acceder a guías de programación y crear espacios con estadísticas deportivas y el estado del tiempo, entre otras informaciones.
Por su parte, la directiva de ciencia e innovación tecnológica del MIC, Grisel Reyes indicó que la introducción de este nuevo sistema representará «un importante esfuerzo económico» para el país, sin precisar cifras de la inversión, y señaló que por eso su aplicación será «progresiva».
Explicó que se eligió a La Habana como «polígono de pruebas» por sus condiciones geográficas, alta densidad de usuarios, muchos edificios altos, y la calidad técnica de las redes que permite la cobertura completa en un territorio complejo.
Entre las ventajas de la transición tecnológica citó el uso eficiente del espectro radioeléctrico, se aligera el sistema de antenas ubicado en las torres de trasmisión que son vulnerables a los huracanes, reducción del consumo energético, uniformidad en la calidad de la imagen y el sonido.
EFE