Investigadores del Instituto de Microelectrónica de Sevilla (IMSE, CSIC-Universidad de Sevilla) desarrollaron un nanochip que fortalece la seguridad de dispositivos electrónicos y los protege contra ciberataques.
Este logro es resultado del proyecto Spirs (Secure Platform For ICT Systems Rooted at the Silicon Manufacturing Process), financiado con 5 millones de euros por la Comisión Europea, según informa el CSIC en un comunicado.
El chip, diseñado como parte de este proyecto, se adhiere a sistemas electrónicos y proporciona una capa adicional de protección a nivel físico (hardware), lo que mejora su resiliencia ante ataques basados en software malicioso (malware).
La coordinadora del proyecto, Piedad Brox, explica que el chip incorpora varios módulos criptográficos que, cuando se combinan, crean una raíz de confianza, lo que lo convierte en un escudo protector altamente seguro.
Entre sus funciones destacadas, el chip genera claves digitales únicas para dispositivos, las cuales pueden utilizarse para crear claves criptográficas altamente seguras y números aleatorios que cumplen con los estándares de calidad establecidos por el organismo internacional de estandarización NIST.
Además, este microchip utiliza técnicas de cifrado para salvaguardar la confidencialidad de los datos digitales y garantizar la autenticidad de los mensajes.
Piedad Brox enfatiza que este chip de bajo consumo y dimensiones reducidas es una solución idónea para reforzar la seguridad de los dispositivos en el ámbito del Internet de las Cosas, beneficiando a numerosas empresas del sector.
En línea con los esfuerzos de la Unión Europea para impulsar la soberanía digital europea, la iniciativa conocida como European Chip Act, y con el objetivo de fortalecer las capacidades de diseño y producción en la industria de la microelectrónica y semiconductores en España, el gobierno español ha puesto en marcha el Perte Chip de microelectrónica y semiconductores.