Con la incertidumbre sobre cuánto tiempo persistirá el virus, podría ocurrir un cambio fundamental en la forma en que las empresas y los empresarios realizan negocios, incluidas las industrias que han sido reacias a dar el salto tecnológico, como la telesalud, los servicios bancarios y financieros y la educación.
Es el caso de el Urban College of Boston, un colegio comunitario de dos años de grado, para madres solteras y no blancas de 30 años, que estaba a punto de cancelar las clases en marzo, cuando por primera vez en sus 27 años de historia ofreció el aprendizaje remoto.
‘Cerramos la universidad el 12 de marzo y nos preguntamos: qué hacemos ahora’, dijo Michael Taylor, presidente de la universidad. ‘Pero la oficina del alcalde llamó y nos habló de una compañía local (LogMeln) que podría ayudarnos’.
‘Tuvimos nuestros primeros cursos en línea el 20 de marzo. El profesorado y los estudiantes, después de algunas dudas iniciales, han asistido a clases a través de teléfonos inteligentes y Chromebooks suministradas por la escuela o computadoras personales’, explicó.
Por otra parte, en los últimos días, cientos de profesionales médicos se han unido a la plataforma digital XRHealth que brinda terapia de realidad virtual y aumentada a los pacientes a través de reuniones virtuales con terapeutas y clínicos para terapia física y manejo del dolor. ‘Esto se ha convertido en el estándar de oro para los médicos’, dijo el CEO de XRHealth, Eran Orr.
Por ahora, solo el 29% de los estadounidenses pueden trabajar desde casa, incluido uno de cada 20 trabajadores de servicios, pero más de la mitad de los trabajadores de la información, según la Oficina de Estadísticas Laborales.
Solo el 5.2% de los estadounidenses trabajaron completamente en casa en 2017, o alrededor de 8 millones de personas, según los datos del Censo de Estados Unidos.
‘Esta crisis se ha concentrado’ y aceleró el movimiento hacia los empleados que trabajan desde casa, comentó Bill Wagner, director ejecutivo de LogMeln, fabricante de herramientas para el trabajo. ‘Después de esta crisis, cada compañía tendrá un plan de respaldo de emergencia de acceso remoto’, aseveró.
El lugar de trabajo en el hogar está fuertemente inclinado hacia los más educados y ricos, que tienen empleadores con amplios equipos y recursos informáticos.
Según los datos de BLS, entre los trabajadores de 25 años o más, el 47% tiene un título universitario o superior y trabajan desde casa a veces, en comparación con solo el 3% de los trabajadores con solo un diploma de escuela secundaria.
Aún así, el cambio se está produciendo lentamente, incluso en industrias con una notoria aversión hacia la tecnología.