La realidad actual de que 2,700 millones de personas carecen de conexión gratuita a Internet ha dado lugar al sueño del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, de llevar Internet a todos los habitantes. Para ello han sido elegidos países de África y América Latina como Colombia, Guatemala y Panamá, así como Brasil y México, sin embargo, el plan ha generado algunas reticencias de colectivos de activismo digital.
En opinión de Chris Daniels, vicepresidente de Internet.org. ‘los operadores han hecho un trabajo excelente: el 90% de la superficie del planeta está conectada a redes de segunda generación, de velocidad baja y el 75% a 3G’.
El proyecto de conectividad ha enfrentado resistencias de entrada, ya que ‘más de 1,000 millones de personas no tienen capacidad económica, y más grave aún, no se tiene conciencia de las bondades de Internet, ya que más de 2,000 millones de personas que están fuera no comprenden el valor que les aportaría’, comenta Daniels.
Más allá de estos impedimentos, existen temores respecto a la necesidad de la Red. Las acusaciones más graves contra Facebook radican en que pone en riesgo la neutralidad de la red, lo cual es uno de los principios fundacionales de Internet.
La legislación actual indica que un usuario tenga el mismo acceso que otro en las mismas condiciones, independientemente del tipo de información que se consulte. Esto da lugar a un Internet de dos velocidades: la de pago y la gratuita, que ofrece Internet.org, que da acceso a cualquier contenido y que sólo puede ver lo que han acordado entre proveedores de contenido, gobiernos y Facebook.
En opinión de Daniels, ‘Facebook está a favor de la neutralidad en la Red. La apoyamos, pero pensamos que tiene que coexistir con programas como el nuestro. Lo importante es que entren en internet los que hasta ahora no han podido hacerlo. Puede que en India no puedan ver los videos de una página web pero sí leer su contenido’.
El directivo niega que vayan a subir la velocidad: ‘no vamos a competir con ello, sino ofrecer una buena experiencia al usuario’.
Otro motivo de fricción ocurre en la factura, es decir, ¿quién paga por los datos que se ofrecen gratis a los nuevos navegantes? No pagamos por el uso de los datos a las operadoras, sino que cada uno de los miembros pone lo que está en sus manos’.
Facebook espera que a la larga los nuevos navegantes paguen por el acceso completo que ofrecen las operadoras.
Finalmente, Daniels declara: ‘Queremos que se pruebe el acceso a la Red, que se conozcan sus bondades, no queremos suplantar nadie’.
Con información de El País