En Francia, la pelea contra las transmisiones pirata de deportes de paga dio un paso importante. Un tribunal ordenó a los servicios VPN bloquear los sitios que transmiten partidos sin permiso.
Canal+, el canal de paga, informó que esta es una decisión inédita que marca un precedente al responsabilizar a las VPN como intermediarios técnicos en la difusión ilegal de contenido deportivo.
Para la Liga Francesa de Futbol (LFP), esta medida es casi única en el mundo y les beneficia, pues planean lanzar su propio canal para transmitir el campeonato a través de LFP Media.
El Tribunal Judicial de París pidió a cinco proveedores de VPN bloquear 203 sitios que transmiten partidos de futbol y rugby, incluidos los derechos de Canal+, como la Champions League.
Esta orden se suma a otras acciones legales contra la piratería: bloqueos en internet tradicional en 2022, contra proveedores ilegales de dominios en 2024 y contra redes de distribución de contenido en 2025.
Las VPN ocultan la IP del usuario y permiten simular estar en otro país, lo que ayuda a la privacidad, pero también facilita acceder a contenidos de paga de forma ilegal.
El alto nivel de piratería en el deporte televisado fue uno de los motivos por los que DAZN no quiso pagar parte de los 375 millones que debía a la LFP por derechos de transmisión. Tras una mediación, acordaron pagar 100 millones para cerrar el conflicto.
El futbol francés ha tenido problemas financieros desde hace años, después de que Mediapro, un grupo español, dejara de transmitir tras comprometerse en 2018 a pagar más de mil millones de euros por temporada entre 2020 y 2024.