Inicio Articulos. Fraudes y robo de identidad frenan desarrollo del eCommerce

Fraudes y robo de identidad frenan desarrollo del eCommerce

El fraude en comercio electrónico es el principal factor que afecta la experiencia de los clientes; el robo de identidad es el más común

Entrevista con Sergio Villarruel, General Manager en Fiserv; y Oscar Bello, Gerente General de Vesta Américas.

 

¿Cuáles son los ataques más recurrentes en la operación transaccional del comercio electrónico?

Oscar Bello: El fraude en el comercio electrónico es cualquier intento de malversación a un negocio y se presenta en diferentes formas: suplantación de IP, suplantación de identidad, correo electrónico sospechoso, transacciones transfronterizas, desajuste geográfico y tarjetas robadas, por nombrar algunas de las muchas formas en que puede producirse el fraude.

Los tipos más comunes de fraude son:

  1. Robo de identidad: es cuando un ciberdelincuente roba los datos confidenciales de otra persona y los utiliza para realizar transacciones en sitios de comercio electrónico.
  2. Prueba de tarjeta: cuando un delincuente realiza una pequeña compra con un número de tarjeta de crédito robado o comprado.
  3. Devolución de cargos: Reportado como un contracargo relacionado con el fraude, los comerciantes reciben cargos cuando un consumidor afirma que la información de su tarjeta fue robada.
  4. Fraude amistoso: que es casi idéntico al fraude por devolución de cargo, excepto que se hace sin intención maliciosa.

De acuerdo con la Condusef, durante el primer trimestre de 2021, el costo por contracargos en comercio electrónico ascendió a 787 millones de pesos, correspondientes a 968,639 transacciones. En lo que va del 2021, el 70% de los fraudes se han producido en el comercio electrónico.

 

¿De qué manera los fraudes y ataques frenan el desarrollo y progreso del comercio electrónico?

Sergio Villarruel: El desarrollo y progreso de los comercios en línea se ven afectados cuando los ciberdelincuentes empiezan a perfeccionar su modo de ataque y robo de información, lo cual hace que los usuarios afectados empiecen a realizar reclamaciones a sus bancos por cargos no reconocidos, situación que provoca que el resultado de las ventas de los negocios no sea el proyectado, afectando directamente la rentabilidad.

El e-commerce en México debe tener soluciones para mitigar lo anterior, ya que el crecimiento del fraude creció 85% más en los últimos 5 años, porcentaje que seguirá incrementado, según Vesta.

 

¿De qué manera los riesgos de fraude y los ataques afectan la experiencia del cliente en las transacciones en línea?

Sergio Villarruel: El fraude en comercio electrónico es el principal factor que afecta la experiencia de los clientes, pues este genera un sentimiento de desconfianza una vez que el usuario se entera que se realizaron transacciones sin su autorización en establecimientos en los que pudo o no haber guardado los datos de su tarjeta.

Ello genera un desgaste, ya que tiene que pasar por todo el proceso de reclamación de cargos no reconocidos con su banco, lo que puede dar como consecuencia un estado de inseguridad provocando que éste ya no vuelva a comprar en al menos un tiempo de forma digital.

Por ello, es tarea de los comercios prevenir este tipo de delitos con la finalidad de que no se vea afectada la reputación de las compras en línea y la experiencia de pago de los usuarios.

 

¿Las transacciones en comercio electrónico implican riesgos que pueden prevenirse?

Sergio Villarruel: Sí, las transacciones en comercio electrónico se enfrentan a muchos riesgos, ya que los usuarios depositan su confianza en los formularios de pago de las diferentes tiendas en línea.

Por ello, los comercios online deben contar con soluciones de pagos con altos estándares de seguridad, como lo es nuestro Fiserv Gateway, plataforma de comercio electrónico y con una garantía de contracargos o fraudes como lo ofrece nuestro partner de negocio Vesta.

Por ello Fiserv, líder mundial en procesamiento de pagos y tecnología financiera anunció recientemente su alianza con Vesta con la cual se busca la prevención y mitigación del fraude en los pagos en línea.

Gracias a los esfuerzos en conjunto, podemos ofrecer al comercio electrónico mexicano una alternativa para mitigar la exposición al fraude y al mismo tiempo reducir el riesgo de contracargos relacionados a estas transacciones.

Ante este panorama, es de suma importancia que los comercios cuenten con este tipo de soluciones que ofrecemos con empresas aliadas, ya que se proyecta que los negocios de e-commerce perderán 130,000 millones de dólares por fraudes de aquí al 2023. (cifras otorgadas por Vesta).

 

El volumen e importancia de las transacciones en comercio electrónico generan un perfeccionamiento continuo de nuevas amenazas. ¿Qué garantías existen para enfrentarlas?

Oscar Bello: Gracias a nuestra avanzada tecnología contra el fraude y el aprendizaje automático de Vesta, respaldado por 25 años de datos transaccionales globales de diversas regiones y verticales, nos permite proteger al comercio electrónico del fraude con una garantía del 100%.

Con el acceso a nuestra amplia y creciente base de datos, podemos identificar a los usuarios genuinos a escala (en lugar de mirar sólo las transacciones individuales) y determinar el comportamiento fraudulento antes de que afecte a los comercios,  es decir tenemos la capacidad de distinguir y detener los ataques fraudulentos antes de que se produzcan, al tiempo que proporcionamos a los negocios la tranquilidad de una garantía del 100% en cada transacción que Vesta aprueba eliminando las devoluciones de cargos.

 

¿Cuál es la propuesta de valor diferencial de Vesta y Fiserv para las empresas que buscan soluciones de punta para prevenir riesgos en la operación transaccional del comercio electrónico?

Oscar Bello: Esta alianza representa un compromiso combinado por parte de Vesta y Fiserv para brindar una mejor experiencia al cliente de comercio electrónico en México. Con Vesta, Fiserv puede ofrecer una alternativa que mitiga la exposición al fraude para el e-commerce mexicano, a la vez que reduce el riesgo de devoluciones de cargos relacionados con esas transacciones.