Project Alloy es el nombre que se ha dado a este proyecto de realidad, cuyo componente más visible es un gran casco.
Los anteojos que utiliza no tendrán que estar conectados a una computadora para mostrar lo que han dado en llamar realidad mixta, en la que se funde la realidad aumentada, como hacen los lentes Hololens de Microsoft y los lentes virtuales de Oculus de Facebook, según explicó Brian Krzanich, CEO de Intel.
Lo interesante de Alloy está en cómo se genera la inmersión y cómo se controla lo que sucede en este mundo virtual. Serán las propias manos, sin más aparatos adicionales, las que sirvan para moverse en estos mundos recreados por máquinas.
Alloy plantea la situación espacial de manera más compleja. En lugar de proyectar solamente un espacio a través de los lentes, tiene en cuenta la localización del sujeto en el mundo real, por lo que éste sabe dónde están las paredes y objetos cercanos.
Además, no hace falta un control o unos guantes especiales para manejarlas, sino que los dedos de la mano cumplen con esta función.
Alloy es un prototipo inicial, cuya novedad radica en que el casco está dotado de una gran potencia. En lugar de usar la potencia del móvil conectado a las gafas o una computadora, los propios lentes son la unidad de proceso.
Krzanich explica cómo funcionará esta solución en un artículo en Medium: ‘La realidad mixta propone un mundo de experiencias virtuales más dinámicas y naturales que nunca. Hace que mundos imposibles sean posibles. Toma en tus manos una raqueta de verdad sin salir del salón y siéntete en Wimbledon. Pero olvídate del costo de tener que llenar cada rincón de tu habitación con sensores, y… practica tu swing’.
Intel, ocupado en su objetivo centrado en las computadoras, dejó pasar la oportunidad histórica de los móviles. Sin embargo, en los últimos años ha intentado recuperar terreno con los wearables y el Internet de las cosas, aunque también ha intentado, de manera tardía, recuperar terreno en la telefonía.
Alloy comenzará a enviarse a finales de 2017 a los desarrolladores, lo que anticipa que su lanzamiento comercial será para 2018.
La adopción por parte de los desarrolladores, cuya conferencia anual será en San Francisco, y que convocará a más de 6,000 participantes, será crucial para asegurar que se contarán con programas y contenido.
Con información de El País