Dentro de los múltiples ahorros que puede generar la inteligencia artificial se encuentra el consumo en centros de datos.
Con inteligencia artificial, Google utiliza el aprendizaje automático para optimizar sus propias operaciones en centros de datos, lo que le ha permitido reducir el consumo de energía en un 40%, explica Tariq Shaukat, Presidente de Google Cloud, ya que los algoritmos pudieron encontrar oportunidades de ahorro que los ingenieros no lograron por sí mismos.
El ahorro de energía en centros de datos es solo un ejemplo de los cientos de formas que la inteligencia artificial tiene para capturar rendimientos potencialmente masivos o reducir drásticamente los costos operativos que representan millones en gastos operacionales y un costo ambiental potencialmente menor.
‘Nuestros puntos focales se concentran realmente en la democratización de la inteligencia artificial y en facilitar las transformaciones de las empresas impulsadas por datos’, agrega Shaukat.
‘Cuando hablamos de democratizar el aprendizaje automático y la inteligencia artificial de manera más amplia, el enfoque que tenemos desde el punto de vista del producto, es como acudir a las empresas que tienen que no tienen una gran planta de especialistas universitarios centrados en el aprendizaje profundo y el aprendizaje automático’.
