El presidente ejecutivo de Airbnb, Bryan Chesky, considera que la oficina como hoy se le conoce ‘es cómo una forma anacrónica. Es de una era predigital’. ‘Si la oficina no existiera, me gustaría preguntar: ¿la inventaríamos?’.
Airbnb anunció el mes pasado que permitiría a sus empleados trabajar casi desde cualquier con el lugar, sin recortes salariales. Chesky dijo en ese momento que la medida reflejaba el sentimiento actual y tenía la intención de retener a los mejores talentos.
Si bien la mayoría de las oficinas en todo el país cerraron durante la pandemia, su reapertura en los últimos meses ha provocado un intenso debate sobre cómo quieren trabajar los estadounidenses, y muchas personas no desean volver a trabajar cinco días a la semana en la oficina.
Chesky afirmó que la respuesta es flexible. ‘La solución va a ser un verdadero híbrido, no tres días en la oficina’, dijo, ‘será una flexibilidad total y luego se reunirá de una manera inmersiva cuando lo necesite’.
El CEO de la popular plataforma de espacios de alquiler añadió dijo que los cambios eran especialmente notables en las empresas más jóvenes. ‘La mayoría de los directores ejecutivos son de una generación diferente’, dijo.
Los líderes jóvenes pensarán de manera bastante diferente, y agregó que prevé que el lugar de trabajo de la próxima década sea más nómada. ‘He predicho que las empresas seguirán teniendo tiempo cara a cara, en persona; simplemente se reducirá drásticamente’.
‘Mi sospecha es que una semana por trimestre probablemente será suficiente conexión humana para que la persona promedio se reúna y se una’, dijo. E incluso eso puede parecer diferente: ‘Si las personas van a una oficina para colaborar, ¿tienen que ir a la ciudad de Nueva York, o pueden ir a un retiro en el norte del estado de Nueva York?’.
La perspectiva de Chesky puede enviar escalofríos a la industria de bienes raíces comerciales, pero está lejos de ser el único que produce cambios masivos en el lugar de trabajo.
Una encuesta mundial reciente mostró que más del 50% de los trabajadores aceptarían un recorte salarial si eso significará tener que ir menos a la oficina, y casi dos tercios buscaría un nuevo trabajo si su empleador les exigiera que regresaran a la oficina a tiempo completo.
Ian Goodfellow, director de aprendizaje automático de Apple, renunció, calificando la política de trabajo híbrido en la compañía –que requiere que los empleados estén en la oficina durante tres días fijos a la semana–, como demasiado restrictiva. ‘Creo firmemente que una mayor flexibilidad habría sido mejor política para mi equipo’, dijo Goodfellow en un correo electrónico dirigido al personal.
La semana pasada, Airbnb informó que superó los 100 millones de reservas en un trimestre por primera vez.
