A pesar de los múltiples obstáculos que enfrenta México actualmente, como la renegociación del TLC, el proyecto del muro fronterizo, las elecciones federales y los fenómenos naturales, el país sigue siendo competitivo, asegura Jorge Silva, Director general de Microsoft México.
En particular, las regiones del Bajío y Nuevo León están creciendo a ritmos interesantes, y se espera ver un crecimiento de doble dígito para este año.
Sin embargo, es importante crear zonas especiales para motivar la inversión y crecimiento en los estados del sur de México, de acuerdo con Silva.
En este sentido, la tecnología contribuye, además de beneficiar al crecimiento del país, a disminuir la corrupción y aumentar la transparencia en las inversiones del Gobierno.
‘Necesitamos más transparencia y competitividad; la tecnología nos da un salto cuántico’, asegura Jorge Silva.
La tecnología es el nivelador universal, genera empleo, impulsa la educación, y ayuda a cerrar la brecha digital. Microsoft tiene la tarea de ver cómo se utiliza para generar impacto en la sociedad, apunta el directivo.
Según Silva, la nube debe ser no sólo un repositorio de información, sino un ecosistema de datos que produzcan valor, dentro de un entorno inteligente con comunicación permanente y a través de cualquier dispositivo; ‘eso es productividad y competitividad’.
La transformación digital, explica Silva, implica confianza entre gobierno y ciudadanos, y que todos los actores sean más participativos, incluyendo al sector privado.
4 factores para la transformación digital
Para habilitar la transformación digital, Microsoft apunta hacia cuatro elementos primordiales: lugar de trabajo moderno, aplicaciones de negocios, aplicaciones e infraestructura, y datos e inteligencia artificial.
Estos cuatro elementos deberán ayudar a las organizaciones a empoderar a los empleados, mejorar la relación con los clientes, optimizar las operaciones y transformar los productos.
En México, Microsoft ya cuenta con diversos ejemplos de organizaciones que han emprendido su camino hacia la transformación digital con grandes resultados.
Por ejemplo, en el sector financiero, el SAT ha logrado reducir el costo de recaudación, y se está apoyando en la formalización y bancarización de la economía.
En logística y transporte, se están empleando sensores e Internet de las cosas para el manejo de flotillas y el monitoreo de las rutas de inventarios, además de mejorar la seguridad en todos los procesos.
En el sector salud, se trabaja en el monitoreo de pacientes en recuperación, además del suministro de medicamentos a farmacias; con analíticos y tableros de mando se monitorean hospitales y centros de salud.
También se está desarrollando un identificador digital en la nube que permita monitorear a los pacientes sin necesidad de obligarlos a ir a un hospital.
‘La transformación digital no es sólo la tecnología, es necesaria pero no suficiente. Hay que cambiar la cultura organizacional’, afirma Silva.
‘Si no cambiamos la visión y mentalidad de crecimiento, no progresaremos como país’, concluye el directivo.