La telefonía IP y la comunicación móvil en América Latina han impulsado en forma significativa el mercado de audioconferencia en la región, dado que las empresas buscan alternativas para la reducción de costos y la mejora de la productividad relacionada con los viajes de negocios
Buenos Aires, Argentina. – Febrero 21, 2007 – La telefonía IP y la comunicación móvil en América Latina han impulsado en forma significativa el mercado de audioconferencia en la región, dado que las empresas buscan alternativas para la reducción de costos y la mejora de la productividad relacionada con los viajes de negocios.
Según la nueva investigación de Frost & Sullivan (www.conferencing.frost.com), El mercado de servicios de audioconferencia en América Latina, el mercado obtuvo ingresos por $15.9 millones en 2005 y se estima que alcanzará $27.2 millones en 2011.
Dos tipos de compañías ofrecen el servicio de audioconferencia: las operadoras de telefonía o carriers y las empresas especializadas en servicios de conferencia. Estas últimas utilizan las redes de las operadoras de telecomunicaciones para brindar servicios de conferencia es sus versiones video, web y audio.
“Gracias al rápido desarrollo de la infraestructura, las compañías latinoamericanas presionan a los proveedores de servicios de audioconferencia para que expandan su oferta. Como resultado, los carriers han desplegado un comportamiento reactivo en contraste con el enfoque proactivo de las empresas no operadoras”, explica Victor Casiano, analista de investigaciones en Frost & Sullivan, quien aclara: “Las empresas no operadoras detectaron una necesidad insatisfecha por parte de los carriers y es por eso que han decidido brindar soluciones de audioconferencia para los mercados corporativos”.
Dado que se trata de un mercado emergente en la región, la mayoría de los países presentan oportunidades interesantes para las operadoras y no operadoras, generadas por la necesidad de los clientes de reducir costos y maximizar la productividad. Las pequeñas y medianas empresas, generalmente, no representan aún un mercado objetivo para los servicios de audioconferencia. Los presupuestos restringidos hacen que utilicen servicios sustitutos, por ejemplo, de voz sobre Internet o llamadas tripartitas.
Más allá de las promisorias oportunidades que presenta el mercado, los usuarios finales todavía no cuentan con el conocimiento necesario acerca de la existencia, el alcance y las posibilidades que ofrecen los servicios de audioconferencia en términos de ahorro en costos y manejo del tiempo. Asimismo, más allá de que el mercado se encuentra en su etapa emergente, deberá enfrentar barreras culturales, como la del valor asignado a los encuentros cara a cara.
“En América Latina, por ejemplo, los operadores ofrecen servicios de audioconferencia sólo como un complemento del portafolio, para así evitar invertir en publicidad y marketing”, explica Casiano. Sin embargo, se espera que, en los próximos años, se ofrezcan soluciones de conferencia teniendo en cuenta las tecnologías de IP existentes.
Para fomentar el conocimiento por parte de los usuarios, las operadoras y otros proveedores necesitarán focalizarse en mostrar los beneficios del servicio. Mientras que este particular mercado está siendo desarrollado por empresas no operadoras, que consideran el segmento como un nicho que impulsará su oferta, las operadoras de telefonía tienen la oportunidad de ser proactivas para dar a conocer sus servicios y, en consecuencia, incrementar su participación en el mercado.
El mercado de servicios de audioconferencia en América Latina es parte del servicio de suscripción de la unidad Conferencing & Collaboration de Frost & Sullivan y provee un panorama del escenario de los servicios de audioconferencia en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Venezuela. La investigación incluye datos sobre las ganancias, claves, limitaciones y tendencias que harán impacto en dicho mercado.
Fuente: Bureaudeprensa.com
