La Unión Europea (UE) no llegó a una prohibición total de Huawei y otros proveedores chinos en el despliegue de 5G, a pesar de las advertencias del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
En un conjunto de pautas comúnmente acordadas sobre cómo mitigar los riesgos derivados del despliegue de las redes de telecomunicaciones de próxima generación, la UE dijo que las empresas con sede en países no democráticos podrían ser excluidas de la adquisición de ciertos componentes centrales, luego de las evaluaciones de las agencias de seguridad.
A pesar del intenso cabildeo de Estados Unidos, la llamada caja de herramientas de medidas, lanzada el miércoles, no recomienda una prohibición general preventiva del equipo chino, una decisión que sigue al Reino Unido, que permite que los componentes de Huawei entren en redes no centrales.
Los estados miembros de la UE tienen hasta el 30 de abril para implementar las medidas de mitigación incluidas en la caja de herramientas.
‘Sabemos que las decisiones de la UE y sus estados miembros tomarán sobre estos asuntos tendrán un impacto en la forma en que nos relacionamos con nuestro socios’, dijo Margrethe Vestager, vicepresidenta ejecutiva a cargo de asuntos digitales. ‘Lo que estamos definiendo hoy es un enfoque europeo para la seguridad 5G’.
La posición de la UE refleja un acto de equilibrio entre las preocupaciones sobre el riesgo de espionaje chino y la reticencia del bloque a pelear con su segundo socio comercial más grande, que en la última década ha expandido su presencia en el continente con proyectos de inversión.
Al llamarlo un ‘enfoque no sesgado y basado en hechos’, Huawei acogió con beneplácito el anuncio de la UE, que dijo que permite continuar participando en el lanzamiento de 5G en Europa.
La misión china en la UE dijo que está ‘estudiando y evaluando’ la caja de herramientas, agregando que China espera que Europa actúe ‘de buena fe para fomentar el entorno justo, abierto y no discriminatorio para la inversión empresarial’.
El nuevo documento de política insta a los estados miembros de la UE a aplicar restricciones ad hoc al mérito para ciertos proveedores de componentes clave 5G, incluidas las funciones básicas de gestión de red, de acceso a la red y de orquestación.
Los criterios de evaluación, ya publicados en diciembre, incluyen ‘un fuerte vínculo entre el proveedor y un gobierno’ y la falta de ‘controles y equilibrios legislativos democráticos’ en el país de origen de la empresa.
Si bien estas pautas pueden alentar a algunos gobiernos a restringir la participación de Huawei y otras empresas chinas en partes de su banda ancha de próxima generación, también dejan margen para la interpretación y no piden una prohibición de facto. Las decisiones se dejan a los estados miembros individualmente, ya que la UE no tiene la competencia para regular centralmente en esta área.
Las propuestas también incluyen reforzar el papel de las autoridades nacionales, auditorías de operadores de telecomunicaciones y medidas para garantizar la diversidad de proveedores para cualquier operador de telecomunicaciones. Además, propone un control más estricto de la inversión extranjera directa en el área de 5G y posibles derechos antidumping, así como otras sanciones para las empresas que se benefician de los subsidios estatales.
Los operadores de telecomunicaciones acogieron con beneplácito el anuncio de la UE, pero instaron a los gobiernos nacionales a evitar reacciones desproporcionadas que afecten negativamente el clima de inversión a medida que implementan las directrices, dijo en un comunicado ETNO, la asociación de algunos de los mayores operadores de telecomunicaciones de Europa. Los operadores agregaron que continuarían persiguiendo una ‘estrategia de múltiples proveedores’.
Los funcionarios estadounidenses han instado durante mucho tiempo a los gobiernos europeos a excluir a Huawei de todas las secciones, centrales y no centrales de sus redes, argumentando que amenazan su seguridad nacional. La UE comparte en gran parte estas preocupaciones, ya que 5G conectará todo a las redes, haciendo que las sociedades sean más susceptibles al sabotaje y a la espionaje.
En una revisión publicada en octubre, el bloque advirtió contra un escenario de pesadilla en el que los piratas informáticos o los estados hostiles asumen el control de todo, desde redes eléctricas hasta comunicaciones policiales e incluso electrodomésticos.
Huawei y funcionarios chinos ha negado reiteradamente que la compañía represente un riesgo de espionaje.
