El iPhone 6s y su hermano mayor, el 6s Plus llegaron hoy a tiendas de todo el mundo en medio de largas filas y previsiones de venta récord durante este fin de semana.
Australia fue el primer país del mundo donde pudieron adquirirse los nuevos modelos de la firma de la manzana.
Cientos de personas esperaron durante horas a la apertura de las puertas e incluso un robot fue visto en la tienda de Apple de Sidney listo para adquirir los teléfonos.
Hubo incluso algunos fanáticos que durmieron en tiendas de campaña en la calle, desafiando el frío y la fina lluvia para ser los primeros en comprar el teléfono.
Similares escenas se repitieron en ciudades como Nueva York, San Francisco y Washington. Hasta allí se desplazó hoy el CEO de Apple, Tim Cook, quien sorprendió al más de centenar de clientes que se daban cita a primera hora en la tienda del barrio de Georgetown.
Los analistas calculan que este fin de semana se vendan entre 12 millones y 13 millones de iPhone en todo el mundo.
Apple ha vendido más de 700 millones de teléfonos desde que los dispositivos debutaron en el mercado en el año 2007, aunque su cuota de mercado, del 16%, es muy inferior al 81% que tienen los teléfonos equipados con el sistema operativo Android desarrollado por Google.
