Por Jesús Fierro Castañeda *
¿Que son los commodities?
El término commodity se utiliza para describir una clase de productos para los cuales existe demanda pero la cual es proveída sin una diferenciación cualitativa a través de un mercado. Los commodities son tratados por el mercado como equivalentes sin importar quién los produce. Por ejemplo, a partir del sabor del trigo no es posible saber quién lo produjo. El petróleo y el cobre son otros ejemplos de commodities. En contraste, artículos tales como los sistemas de audio estéreo poseen muchos aspectos de diferenciación de producto, tales como la marca, la interfaz de usuario, la calidad percibida, etc. y entre más valioso se perciba un equipo estéreo, mayor será su costo.
La ‘commoditización’ ocurre cuando un mercado de bienes o servicios pierde la diferenciación en su base de proveeduría, a menudo por la difusión del capital intelectual necesario para adquirir o producir eficientemente los productos. Por ejemplo, bienes que anteriormente tenían márgenes premium se han convertido en commodities, tales como los medicamentos genéricos o las memorias DRAM. Otro ejemplo es la tarjeta de crédito como producto en países desarrollados, en donde los proveedores ofrecen tasas de interés casi idénticas, cuotas, programas de recompensas y modelos de incentivos ‘cebo y anzuelo’ para nuevos clientes. Debido a que el producto tarjeta de crédito es esencialmente idéntico, los únicos diferenciadores de mercado que se mantienen son la identidad de marca y el servicio al cliente.
Sin embargo, existe un espectro dentro de la ‘commoditización’, en lugar de una distinción binaria de commodity versus producto diferenciable. Pocos productos son indiferenciables por completo.
¿Los equipos de CCTV son commodities?
Decir que las cámaras son commodities es claramente una necedad cuando se habla de equipo profesional de CCTV de alto perfil; conforme nos acercamos al nivel de precios más bajo en el mercado las cosas se tornan más confusas pues podemos encontrar ofertas engañosas de cámaras “de muy altas especificaciones” por 20 dólares. Desde luego, estas especificaciones solamente existen en la hoja técnica.
Hasta finales de los años 80, los equipos de CCTV eran prácticamente utilizados solo en aplicaciones profesionales, eran muy costosos y su instalación requería de personal calificado. Conforme la electrónica fue avanzando el costo de los equipos fue bajando y la funcionalidad que poseían los hacía cada vez más fáciles de instalar.
Al mismo tiempo, el agregado de la innovación en los métodos de producción, el nacimiento de la industria TI, la creciente clase media y la globalización del comercio generaron una industria de bienes de alto consumo que crearon economías de escala sin precedentes. Esta industria de electrónica de consumidor benefició y al mismo tiempo afectó a la industria de CCTV profesional: por un lado los precios de los equipos profesionales han descendido en forma relativa e incluso apareció una categoría de equipos semiprofesionales de costo medio. Pero al mismo tiempo surgió otra categoría de equipos de consumo masivo y bajo precio cuya relación costo-beneficio es muy deficiente.
Los fabricantes de CCTV profesional continúan invirtiendo grandes cantidades de recursos en investigación y desarrollo para innovar, así como para mantener una red de distribución de alto nivel, proporcionar soporte local y garantizar sus productos. Sin embargo, por la naturaleza del producto, estos fabricantes no alcanzan los niveles de producción necesarios para generar grandes economías de escala debido a que la demanda no es del tamaño requerido para ello.
Algunos fabricantes de equipo profesional han extendido su oferta de equipos hacia el nivel de precio medio. Estos equipos profesionales con prestaciones básicas están dirigidos a un mercado usuario en donde las aplicaciones no son tan demandantes como las del mercado profesional, y que por ende puede cubrir perfectamente sus requerimientos con un conjunto de especificaciones y funcionalidad más reducido. Estos usuarios ahora no requieren gastar excesivamente en equipos que van a subutilizar, ya que estos equipos son profesionales, pero incluyen solamente las prestaciones básicas que requieren. Emplean la misma excelencia en diseño, calidad de materiales y mano de obra de fabricación y ofrecen una red de servicio profesional y garantía del mismo fabricante que crea las versiones de más alto perfil.
Los fabricantes de equipos de consumo masivo generalmente utilizan la ingeniería en reversa para copiar el diseño más básico de los equipos semiprofesionales y crear versiones muy económicas, dirigidas al público en general, creando de esta forma economías de escala relativas, aunque no comparables con las economías de escala de bienes electrónicos de gran consumo.
Debido a esto, la red de servicio para estos equipos es prácticamente inexistente, y la forma de atender las garantías es a través de distribuidores maestros. Estos fabricantes calculan de entrada altos índices de mortandad infantil en sus costos, con lo que los consumidores acaban por pagarles por adelantado su baja calidad. Después de un año, será difícil que consigan repuestos para los sistemas ya instalados. Son equipos para “usarse un rato” y después remplazar; en ocasiones se debe sustituir la totalidad del sistema por motivo de la compatibilidad de sus componentes.
¿Que diferencias existen entre los equipos profesionales, semiprofesionales y la copias?
Algunas diferencias se pueden apreciar en la siguiente tabla, que ilustra la relación entre desempeño y precio.
Recomendaciones para seleccionar correctamente cámaras de CCTV
Para la selección de cualquier equipo de seguridad en general, pero especialmente equipo de video, recomendamos lo siguiente:
Equipos en general (profesionales, semiprofesionales)
- Antes que nada, compara solamente equipos de marcas acreditadas, con soporte local.
- Tómate el tiempo necesario para efectuar tus investigaciones y recabar información.
- Siempre que sea posible, pide una demostración. La hoja de datos es solamente una guía para comparar.
Equipos Profesionales (precio alto)
- Acude a canales de distribución (integradores, instaladores) con capacidad de ejecución. Recuerda que no solamente estás adquiriendo un producto, sino un servicio que resultará en un sistema llave en mano.
- En proyectos grandes y medianos siempre pide la asesoría de los fabricantes que estés considerando.
- Haz siempre una comparación de equipos lado-a-lado. Los fabricantes serios apoyan con equipo de muestra e incluso ingenieros de aplicaciones para estas pruebas.
Equipos semiprofesionales (precio medio)
- Acude a canales de distribución (pequeños integradores, instaladores) con capacidad de ejecución. Si acudes a un VAR (revendedor con valor agregado) asegúrate de que proporcionará soporte técnico a quién haga la instalación, y de preferencia que cuente con una lista de instaladores certificados por el fabricante.
- Existen proyectos grandes y medianos en esta categoría (p.ej., cadenas de farmacias), y dado que en el caso de muchas instalaciones replicadas que se trata de grandes inversiones se aplican las mismas recomendaciones de los equipos profesionales.
Equipos “copias” (precio bajo)
- Recomendamos abstenerte de malgastar tu dinero en estos productos.
* Sistemas de Seguridad, Robert Bosch México