Samsung Electronics estimó hoy una reducción interanual del 6.11 por ciento en su utilidad operativa del período octubre-diciembre, el primer retroceso en dos años en un momento de elevada competencia en el mercado de los dispositivos inteligentes.
En su primera estimación de los resultados del último trimestre de 2013, el gigante surcoreano pronosticó una utilidad operativa de 8.3 billones de wones (unos 7,780 millones de dólares), cifra que también supone una caída del 18.3 por ciento en relación al trimestre anterior.
A la espera de que la compañía publique a finales de mes sus resultados definitivos -incluida la utilidad neta-, el dato muestra una desaceleración en el que parecía imparable crecimiento de Samsung Electronics, que venía encadenando un récord tras otro en los pasados trimestres.
El bache, advertido en los pasados días por las principales firmas de valores y consultoras surcoreanas, responde según expertos a varios factores, entre ellos el endurecimiento de la competencia en el mercado cada vez más competitivo y saturado de los dispositivos inteligentes.
Aún en este escenario, las ventas de Samsung avanzaron en el cuarto trimestre de 2013 un 5.24 por ciento interanual hasta 59 billones de wones (unos 55,200 millones de dólares), lideradas por sus smartphones y tabletas de la exitosa serie Galaxy.
Los analistas de Corea del Sur también citaron otras variables a la hora de explicar la reducción de utilidades de Samsung, como el reparto de cuantiosas bonificaciones de la empresa a sus empleados o la fortaleza de la moneda local, el won, en paralelo a la devaluación del yen japonés.
La consultora surcoreana Woori Investment and Securities estimó en unos 655 millones de dólares las bonificaciones especiales pagadas por Samsung a sus empleados de todo el mundo en el último trimestre de 2013, lo que habría reducido notablemente el beneficio operativo en ese tramo.
Además, la progresiva devaluación del yen japonés en contraste con la apreciación de la moneda local, el won, durante el período octubre-diciembre podría haber contribuido a restar competitividad a los productos de la empresa surcoreana en beneficio de sus competidores japoneses como Sony o Panasonic.
Por último, la batalla legal de Samsung contra Apple en más de una decena de países, que en 2013 se ha saldado con varios fallos favorables a la firma estadounidense, también podría haber jugado un papel negativo importante, según apuntó un analista de la consultora surcoreana Shinhan Investment.
Samsung Electronics sufrió un duro revés en su propio territorio el pasado 12 de diciembre, cuando un tribunal de Seúl dictaminó que Apple no había copiado tres de sus patentes.
Un mes antes un jurado de California condenó a Samsung a pagar otros 290 millones de dólares a Apple, lo que elevó a 890 millones de dólares la cantidad total que la firma surcoreana debe aportar a la estadounidense en el marco de su guerra de patentes en Estados Unidos.
En todo caso Samsung Electronics, mayor fabricante de smartphones del mundo, culminó un año 2013 de récord, en el que habría acumulado una utilidad operativa de 36.77 billones de wones (34,400 millones de dólares), un 26.5 por ciento más que el año anterior, según la estimación anunciada hoy.
El nuevo récord del gigante de la electrónica responde en parte al éxito de su teléfono inteligente Galaxy S4, del que se comercializaron más de 40 millones de unidades en todo el mundo en los primeros seis meses desde su salida a la venta el pasado abril.
Como parte de sus esfuerzos para hacer frente a la intensificada competencia del mercado, Samsung Electronics también lanzó en 2013 el reloj inteligente Galaxy Gear y la phablet Galaxy Note 3, de la que ha vendido más de 10 millones de unidades desde septiembre.
EFE