LG está cambiando el concepto del proyector gracias al evolución del LED y el láser, que desaparecen la tradicional bombilla y ahora los equipos son más compactos, silenciosos y con una resolución que hacen olvidar el televisor tradicional.
La firma surcoreana presentó su nueva oferta de proyectores, con la idea de que los consumidores jubilen sus televisores e incorporen un proyector en sus hogares, permitiendo una gran movilidad al colocar los equipos en cualquier lugar, tanto así que los han llamado ‘televisores libres’, ya que ‘ningún otro dispositivo permite esta flexibilidad de tamaño y resolución en tan poco margen de tiempo’.
Al igual que en el cine, la experiencia de ver contenido en una pantalla grande es distinta al hacerlo en una superficie más pequeña. La nueva tecnología permite que en el mismo espacio se pueda pasar de un televisor de 75 pulgadas a una pantalla proyectada en 150 pulgadas, sin perder calidad de imagen.
LG con una nueva gama de proyectores para este 2018 permite tener una gran pantalla incluso en espacios reducidos, gracias a su opción de tiro corto con el que bastan 11 cm de distancia a la pared para tener una pantalla de 100 pulgadas.
Aún así, el tamaño que ofrece el portafolio de la compañía sur coreana va desde las 30 a las 150 pulgadas con resolución HD, Full HD y 4K, con lo que incluso con luz directa se puede ver el contenido a la perfección, algo de lo que adolecían los equipos de bombilla.
Los proyectores no solo tienen una gran resolución, sino que están diseñados para consumir contenido de la forma más fácil y rápida posible. Cuentan con WebOS, el mismo software de sus Smart TV, con lo cual disponen de aplicaciones como Netflix para ver series o televisión en directo de forma más cómoda. Además, disponen de otro tipo de conexiones que van desde duplicar contenido desde el móvil tradicional USB, así como conectar equipos de sonido de forma inalámbrica para tener una experiencia más completa.
El punto fuerte
Ahora bien, el punto fuerte de los nuevos proyectores de la compañía es su alta portabilidad, ya que permiten al usuario tener un televisor de grandes dimensiones en cualquier lugar sin instalación: enchufar y ver. ‘Por primera vez es el televisor el que se adapta a la persona y no el revés’, recalcan desde la empresa.
Su catálogo cuenta con 10 proyectores, de los cuales 3 son de tecnología láser y el resto funciona bajo emisión LED, pero todos, hasta su proyector más ambicioso el HU80K que dispone de resolución 4K, están pensados para ser transportados fácilmente.
Todos los modelos pueden adaptarse a cualquier entorno, pues basta con moverlo y encenderlo para usar el equipo en la sala y en el dormitorio, ajustando la pantalla a cada una de las habitaciones.
Si se desea un proyector para la ultra movilidad, LG cuenta con cinco modelos que van desde los 699 hasta los 349 euros y que pueden funcionar con batería, con lo cual se puede ver una serie, una película, un videojuego o un partido de fútbol en cualquier lugar. La duración de ésta va desde las 2.5 hasta las 4 horas con una carga completa y la resolución de proyección sube hasta el FullHD en el modelo superior.
Aún más, si lo que se busca es un proyector más ambicioso, en el que prime la pantalla de grandes dimensiones a una resolución mucho más refinada, LG cuenta con tres modelos de láser con resoluciones Full HD y4K. Su precio oscila entre los 1,799 hasta los 2,999 euros del modelo HU80K. Esta es una inversión elevada pero que se justifica contra los televisores en esos precios por su versatilidad y un tamaño mucho mayor para ver contenidos.
Incluso el modelo más caro está pensado para adaptarse a todos los entornos de hogar. Dispone de un diseño compacto y resistente que permite ser colocado en vertical u horizontal. Cuenta con un asa para transportarse de forma fácil, pesa 6.5 kilos y dispone de un sistema que, como las aspiradoras, permite recoger el cable para moverse a cualquier lugar.
Además de ser más livianos, compactos, silenciosos y emitir contenido a una alta resolución, la nueva tecnología láser y LED permiten olvidarse del mantenimiento de los equipos. Con los proyectores tradicionales había que estar cambiando la bombilla cada tres o cuatro años, pues un nivel de brillo calidad iba decayendo con el tiempo. La nueva tecnología hace que esto sea un problema que quedó en el pasado.
En concreto, según las pruebas realizadas por LG, prometen que la vida útil de su equipos sea de hasta 20 años para los proyectores LED y de más de 15 años para los que incorporan tecnología láser, siempre teniendo como referencia un uso diario de cuatro horas de los dispositivos. Asimismo, otra de las ventajas es que tanto el láser como el LED requieren menos consumo que los equipos tradicionales, un 52% menos, indica la empresa.
