El consumidor móvil es especialmente sensible en su experiencia de compra, ante lo cual establece su conducta como consumidor, así como su lealtad a la marca.
De hecho, este consumidor ejerce cada vez mayor influencia, ya que sus compras representan el 17% de todas las ventas online, mismas que tuvieron en 2013 un incremento del 55% respecto al año anterior en Estados Unidos.
Las plataformas móviles seguirán creciendo a un ritmo incontenible, impulsando así la demanda de productos y servicios, en tal proporción que, según Gartner, en 2013 las compras abonadas a través de móviles sumarían 235,000 millones de dólares, es decir un 44% más que el año anterior y con un total de 245.2 millones de usuarios (ver: el valor de las compras móviles crecen 44%)
No obstante, sólo el 9% de los compradores opinan que la experiencia móvil supera a las transacciones online. La mayoría de las quejas se centran en el diseño y en general en la experiencia del cliente.
Al parecer, la mayoría de las empresas desean extender su presencia online, pero aún no reconocen la importancia de desarrollar una experiencia móvil dentro de una estrategia omnicanal que cubra los modelos de consumo del cliente y que su evolución sea al ritmo del cambio de un nuevo consumidor.