El consejero delegado de Nokia, Stephen Elop, confía plenamente en el resurgir de la compañía finlandesa en el complicado mercado de la telefonía móvil, gracias a los dispositivos básicos de la gama Asha y a los nuevos teléfonos inteligentes Lumia equipados con Windows Phone 8.
En una entrevista publicada hoy en el diario Helsingin Sanomat, Elop asegura que se está produciendo un importante cambio en la industria que ayudará a Nokia a frenar su rápido declive y a mejorar su posición en el mercado.
En el último año, Nokia ha cedido al gigante surcoreano Samsung el liderazgo mundial en el sector de la telefonía móvil y su cuota de mercado en el segmento de los smartphones se ha desplomado desde el 15% hasta el 3.8%, según la consultora Strategy Analytics.
En opinión de Elop, el sistema operativo Android de Google -el más utilizado del mundo actualmente- está empezando a quedarse estancado, lo que lleva a un número creciente de consumidores a buscar otras alternativas más avanzadas.
«Cada vez que lanzamos nuestros nuevos modelos de teléfono, los productos de la competencia empiezan a parecer anticuados. En esta situación, tenemos todas las opciones de aumentar nuestra cuota de mercado», afirma Elop.
El máximo responsable de Nokia cree que la clara hegemonía de la compañía surcoreana Samsung, el mayor fabricante mundial de móviles, en el mercado de los smartphones Android a costa de otros rivales puede beneficiar a la firma finlandesa a medio plazo.
«La posición dominante de un solo fabricante no es, desde luego, algo positivo desde el punto de vista de Google. Van a suceder muchas cosas en un futuro próximo», sostiene.
En su opinión, Nokia solo tiene problemas significativos actualmente en una de sus cinco áreas de negocio, la de los smartphones, debido al proceso de transición de sus antiguos sistemas operativos, Symbian y MeeGo, hacia el Windows Phone de Microsoft.
El reciente lanzamiento de su smartphone más avanzado, el Lumia 920, podría significar el comienzo de una nueva era para Nokia en este lucrativo pero difícil mercado.
Las excelentes cifras de ventas de este modelo en países como Estados Unidos y Alemania empujaron al alza el pasado lunes las maltrechas acciones de Nokia, tras perder más de la mitad de su valor en los últimos doce meses.
«El Lumia 920 es, en nuestra opinión, el smartphone más avanzado del mundo. He visitado tiendas de móviles en distintos países donde lo comercializan como uno de los nuevos productos más revolucionarios», sostiene Elop.
El resto de las áreas de negocio de Nokia (teléfonos básicos, redes de telecomunicación, localización y patentes) muestran signos de crecimiento que pueden ayudar a la compañía a recuperar la rentabilidad perdida en los últimos años.
En el tercer trimestre del año, Nokia vendió 6.5 millones de móviles básicos de la gama Asha, lo que le permitió hacer frente a la creciente competencia de sus rivales asiáticos.
En el negocio de redes, Nokia Siemens Networks (NSN) ha implementado un proceso de reestructuración con el que ha logrado recuperar la senda de las utilidades y superar en rentabilidad a su principal rival, la sueca Ericsson.
Esta remodelación supondrá la supresión de 17,000 empleos en todo el mundo (el 23% de su plantilla) y permitirá a NSN ahorrar cerca de mil millones de euros anuales antes de 2014.
También crece a buen ritmo el área de mapas digitales y localización de Nokia, con la extensión de sus servicios a compañías como Amazon y Oracle y el reciente lanzamiento de Here, una aplicación de cartografía para las plataformas iOS y Android.
El negocio de patentes, fruto de la inversión de Nokia en investigación y desarrollo (I+D), aportará a la compañía finlandesa este año unos ingresos de 500 millones de euros en concepto de licencias, según sus propios cálculos.
Nokia registró entre enero y junio el mayor volumen de solicitudes de nuevas patentes desde 2007, cuando era el líder indiscutible de la industria, lo que, según Elop, es un signo de que la compañía ha recuperado su nivel de innovación y productividad.
EFE
