OpenAI inició una colaboración con el Pentágono de EU en diversos proyectos de seguridad, marcando un cambio respecto a la prohibición anterior de proporcionar su inteligencia artificial a fines militares.
El fabricante de ChatGPT está desarrollando herramientas en conjunto con el Departamento de Defensa de Estados Unidos, centrándose en software de ciberseguridad de código abierto.
La colaboración incluye la participación con DARPA en su AI Cyber Challenge, anunciado el año pasado. Además, la empresa ha mantenido conversaciones preliminares con el gobierno para abordar métodos que ayuden a prevenir el suicidio de veteranos.
Recientemente, OpenAI eliminó la prohibición de uso militar y de guerra de sus términos de servicio.
Anna Makanju, vicepresidenta de asuntos globales de la compañía, explicó que esta decisión forma parte de una actualización más amplia de políticas para adaptarse a los nuevos usos de ChatGPT y otras herramientas.
Makanju subrayó que, aunque levantaron la prohibición general sobre el uso militar, la empresa sigue firme en su decisión de no permitir la utilización de su tecnología para desarrollar armas, destruir propiedades o causar daño a personas.
OpenAI también expresó su compromiso con la seguridad electoral, dedicando recursos para evitar que sus herramientas de inteligencia artificial generativa se utilicen para difundir desinformación política.
‘Las elecciones son de suma importancia’, afirmó Sam Alman, director ejecutivo de OpenAI. ‘Creo que es apropiado que tengamos una gran preocupación al respecto’.