Corea del Norte anunció la prohibición a los extranjeros que residen en el país el uso de conexiones WiFi para acceder a internet, aparentemente para evitar que ciudadanos norcoreanos puedan usarlas para conectarse a la red.
Según un decreto gubernamental, se notifica a embajadas, a ONGs y a funcionarios extranjeros presentes en el país que el uso de esta conexión inalámbrica queda abolido debido a que su empleo produce ciertos efectos en el entorno que no quedan especificados. El Departamento Regulador de Radio norcoreano, que firma el documento con fecha del pasado 13 de agosto, explica que aquellas misiones extranjeras que deseen volver a utilizar en el futuro la conexión WiFi deberán consultarlo primero con el organismo.
El texto advierte de que aquellos que no respeten la prohibición se enfrentan a una multa de hasta 1.5 millones de wones (unos 11,000 dólares).
La orden se ha emitido después de que la revista The Diplomat publicara en agosto que el precio de las viviendas colindantes a embajadas y organismos internacionales que utilizan este tipo de conexiones en Pyongyang se estaba incrementando con creces.
Esto se debería supuestamente al deseo de los ciudadanos de la hermética Corea del Norte -donde solo unos pocos ciudadanos de las élites del régimen dirigido por Kim Jong-un obtienen permisos para acceder a internet- por conectarse a la Red.
Expertos consultados por NKnews consideraron que el hecho de que el Departamento Regulador de Radio abra la puerta al posible uso de WiFi previa consulta puede significar que las autoridades exigirán que las señales sean encriptadas para evitar el acceso remoto sin autorización.
EFE