Miles de personas se manifestaron hoy en las calles de Berna, la capital de Suiza, para protestar contra el despliegue de las redes de telefonía 5G.
Según los organizadores de las protestas, estas redes de quinta generación son perjudiciales para la salud y exponen a la población a una ‘radiación forzada‘.
Los manifestantes se concentraron frente al Parlamento federal, en el centro de la ciudad, para expresar su preocupación por los riesgos sanitarios, medioambientales y de seguridad que según ellos entraña la nueva tecnología, que ya comenzó a funcionar en el país en abril, aunque por ahora de forma limitada.
La plataforma Frequencia, una de las organizadoras de la protesta, demanda una moratoria nacional del despliegue de estas redes, así como la creación de zonas libres de todo tipo de ondas de telecomunicaciones.
El Gobierno suizo dio licencia para operar redes 5G a las tres principales compañías telefónicas del país, y la primera de ellas, Swisscom, puso en marcha esta tecnología el 17 de abril en 54 localidades del país, entre ellas Berna y otras grandes ciudades.
Frente a este desarrollo del 5G en Suiza, uno de los países pioneros en el despliegue de esta red, varios gobiernos locales han mostrado cautela ante los posibles efectos perjudiciales que sobre la salud podrían generar las antenas y los campos electromagnéticos creados por ellas.
Se espera que con la tecnología 5G, por cuyo desarrollo han apostado especialmente multinacionales chinas como Huawei o ZTE, se multiplique por 20 la velocidad de navegación de las redes 4G, aunque al precio de aumentar el número de antenas, ya que la circulación de estas ondas exige más repetidores.