Gran Bretaña se encuentra entre los países europeos que enfrentan las restricciones que padece Huawei, quien tiene el compromiso de ayudar a mantener a la isla ‘a la vanguardia de la era digital’, y en particular en las comunicaciones 5G.
El Reino Unido se encuentra entre las naciones europeas preocupadas por las restricciones del gigante tecnológico que, según los operadores de telefonía, podrían retrasar las redes móviles de quinta generación, necesarias para conectar autos sin conductor y fábricas automatizadas, entre otras muchos sectores de la industria.
Europa no ha estado a la vanguardia de 5G, incluso antes de que el gobierno de Donald Trump comenzara a presionar a los aliados para que bloquearan Huawei por preocupaciones de que el gobierno chino pueda usar su equipo para espiar, cosa que la compañía ha negado repetidamente.
El Reino Unido ha estado considerando si bloquear a Huawei o seguir manejándolo a través del diálogo y la supervisión. Si bien no se ha tomado una decisión, el país puede dirigirse hacia un enfoque más suave que las prohibiciones en Australia y Nueva Zelanda.
El organismo de control de seguridad cibernética del país determinó que los riesgos se pueden manejar, según personas familiarizadas con el tema; y el mes pasado, un funcionario británico, que pidió el anonimato, dijo que era improbable una prohibición.
No obstante que 5G promete velocidades de descarga de gigabits por segundo 10 veces más rápido que 4G y a un costo menor para los operadores, se espera que los ejecutivos europeos de telecomunicaciones sean relativamente lentos para invertir, por temor a que el gasto no se recupere por un largo tiempo.
Las compañías europeas generalmente son menos rentables y los reguladores han bloqueado las fusiones que permitirían una escalada de operadores. El espectro necesario para 5G no se ha asignado todavía y los gobiernos están listos para aprovecharlos con miles de millones de euros en subastas el próximo año.
Huawei está profundamente integrada en las redes de telecomunicaciones de Europa, por lo que las restricciones podrían ser más disruptivas que en otros lugares.
En Estados Unidos, la industria generalmente ha evitado a Huawei bajo la presión del gobierno. El gobierno chino por su parte, lejos de limitar a sus proveedores de telecomunicaciones que enfrentan un escrutinio global, puede imponer un despliegue de 5G más rápido para respaldar a Huawei y ZTE, dijeron el mes pasado analistas de New Street Research.
Huawei llegó a Europa desde hace una década para suministrar aproximadamente un tercio de los sistemas de telecomunicaciones.
Se ha posicionado para ser un proveedor crítico de antenas, conmutadores, ruteadores, celdas pequeñas y equipo de corte de red para 5G, mediante la realización de pruebas con operadores.
La compañía recibió ayuda de agencias de seguridad que le abrieron la puerta mientras monitoreaban de cerca sus equipos.
Esta aceptación cautelosa ahora está en duda cuando los gobiernos se dan cuenta de lo difícil que será 5G para la vigilancia. Con las redes 4G, los datos generalmente se canalizan a través de un núcleo central, o cerebro, mientras que con 5G se procesan y envían entre múltiples puntos de una disposición más dispersa, que podría dificultar la detección de debilidades y cortes.
Ante una perspectiva turbia, los transportistas en la región no parecen estar listos para abandonar Huawei. British Telecom está construyendo su red 5G asumiendo que Huawei estará involucrado, mientras estudia las opciones de contingencia que podrían incluir confiar más en otros proveedores, dijo una persona involucrada en la planificación.