El grupo minero Río Tinto presentó una propuesta de adquisición para comprar Arcadium Lithium, según confirmaron ambas compañías.
Esta iniciativa se suma a una serie de ofertas de adquisición en un sector que ha retomado el enfoque en el crecimiento, impulsado por la necesidad de incrementar la exposición a metales clave para la transición energética.
Río Tinto, que se posiciona como el segundo mayor minero del mundo, no ha revelado detalles financieros sobre la propuesta preliminar. Sin embargo, de concretarse la operación, se convertiría en su adquisición más relevante en más de una década, al incorporar un productor de metales esenciales para la fabricación de baterías.
Los grandes mineros han vuelto a interesarse en adquisiciones e inversiones estratégicas, pero lo hacen con cautela, debido a que en ciclos anteriores muchas transacciones mal planificadas resultaron en depreciaciones multimillonarias que afectaron a sus balances.
Arcadium, reconocido como uno de los principales productores de litio a nivel mundial, opera en mercados clave como Argentina, China, Canadá y Australia. La empresa no ha dado detalles adicionales sobre la oferta, aunque algunos inversionistas han mostrado inquietud ante el posible oportunismo de Río Tinto al plantear la operación en este momento.
El comportamiento del mercado de litio ha sido inestable en lo que va del año, ya que un exceso de oferta y una demanda reducida de los fabricantes de vehículos eléctricos han presionado a la baja los precios de este material fundamental para la producción de baterías. El valor del carbonato de litio en el mercado chino ha registrado una caída superior al 85% desde su pico en 2022.
La amplia presencia geográfica y la diversidad geológica de Arcadium son características difíciles de replicar en otras empresas del sector, lo que sugiere que Río Tinto podría estar buscando crecimiento en varias regiones. La capacidad operativa de Arcadium en diversos tipos de litio, como las salmueras y el mineral de espodumena, permitiría a Río Tinto acelerar el desarrollo de sus propias capacidades en la industria.
Un análisis de Arcane Capital VVC en Singapur señala que la empresa podría no estar dispuesta a aceptar una oferta inferior a los 5,000 millones de dólares, considerando que cuenta con la capacidad de financiar su expansión a lo largo de la próxima década, aunque a un ritmo más conservador.
Desde una perspectiva estratégica, algunos expertos consideran que para las compañías que buscan aumentar su escala, lograr costos competitivos y desarrollar experiencia en procesos químicos avanzados, la adquisición de Arcadium podría resultar más rentable que tratar de construir estas capacidades desde cero.