El Gobierno de Japón planea introducir robots con inteligencia artificial (IA) en las escuelas, capaces de hablar inglés durante las clases de esta materia, para ayudar a los niños a mejorar su destreza oral, una de las peores del mundo.
El Ministerio de Educación nipón lanzará una prueba piloto para probar la eficacia de la iniciativa en abril de 2019 en 500 colegios de todo el país, con el objetivo de implementarlo completamente en dos años,.
El ministerio también pondrá a disposición de los alumnos aplicaciones para el estudio y sesiones de conversación en línea con nativos de habla inglesa, como una solución a la falta de fondos que dificulta la contratación de suficientes profesores angloparlantes.
El inglés es una de las asignaturas pendientes del país asiático, que se ha propuesto mejorar en la materia ante el aumento del número de turistas que espera durante los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Los datos más recientes del índice de dominio del inglés English Proficiency Index EF (EF EPI), de 2017, otorga a Japón el puesto 37 de su lista, compuesta por un total de 80 países, lo que lo sitúa doce puestos por detrás de Argentina y nueve tras España.
El último ránking de calificaciones del examen oficial de inglés TOEFL publicado el mismo año revela que Japón es uno de los países asiáticos que peores calificaciones obtiene, sólo por encima de Laos, y donde destaca la baja puntuación en la prueba oral, una de las peores del mundo junto a la de Burkina Faso o Congo.