Las ganancias netas de Samsung Electronics subieron un 31.3% entre julio y septiembre gracias a su negocio de semiconductores, aunque la caída de precios de los chips prevista para final de año augura un cuarto trimestre menos robusto.
El gigante tecnológico surcoreano logró un beneficio neto de 12.29 billones de wones (unos 10,483 millones de dólares) en el tercer trimestre, con la división de Soluciones para Dispositivos de nuevo como principal impulsor de sus ganancias.
Los ingresos por ventas impusieron un récord para un tercer trimestre al facturar 73.98 billones de wones (63,107 millones de dólares), un 10.48% más que hace un año.
La tendencia de precios al alza ante la fuerte demanda de memorias DRAM vista durante lo peor de la pandemia, unida a una mayor rentabilidad de sus operaciones de fabricación por contrato supusieron una mejora significativa en ingresos, explicó Samsung en un comunicado.
La rama de semiconductores fue el principal impulsor al aportar una facturación 40.4% superior, comparada con el tercer trimestre de 2021 lo que supone unos 26.41 billones de wones (22,502 millones de dólares).
En términos operativos, el beneficio en este caso fue de unos 10 billones de wones (8,553 millones de dólares), casi el doble que hace un año, y supuso dos terceras partes de la ganancia operativa de la empresa en julio-septiembre.
En todo caso, la caída del won frente a las principales divisas -especialmente con el dólar- durante el tercer trimestre tuvo fue un factor de peso para Samsung con un impacto positivo de unos 800 millones de wones (684 millones de dólares) en comparación con los tres meses anteriores.
La rama de telefonía logró por su parte ingresar un 25.36% más que en el trimestre anterior gracias al lanzamiento en agosto de dos nuevos teléfonos plegables, el Galaxy Z Fold3 y el Galaxy Z Flip3, aunque la cifra supone a su vez un 6.78% menos en términos interanuales.
Esta división facturó además 3.36 billones (2,873 millones de dólares), apenas un 3.7% más que en abril-junio y un 24.5% menos si se compara con los números del tercer trimestre de 2020.
Por otra parte, la caída en los precios de las memorias que prevén los analistas para final de año ante una ralentización de la demanda que responde al fin de las restricciones más duras por la pandemia en la mayoría de países plantea dudas acerca del rendimiento financiero de la empresa en octubre-diciembre y el inicio del año.
La página especializada TrendForce prevé en ese sentido que los precios de las memorias DRAM caigan entre un 15% y un 20% de octubre a diciembre y sigan cayendo al comienzo de 2022.
Aunque esta tendencia a la baja se antoje preocupante, Samsung espera que la demanda para nuevos servidores se mantenga lo suficientemente fuerte ante la persistente inversión en nuevos centros de datos.
En lo que se refiere a telefonía, el gigante surcoreano espera una una rentabilidad robusta en el cuarto trimestre merced a una mayor comercialización de productos de gama alta, como los teléfonos plegables anteriormente mencionados.
También prevé mayores ventas de dispositivos de gama baja y media para 5G y de tablets y relojes inteligentes.